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En las últimas semanas, Grecia ha estado en las primeras páginas de todos los diarios del mundo, y en las noticias principales de los noticieros globales, debido a la profunda crisis económica y social en que se encuentra sumida. Grecia es uno de esos lugares del mundo que, con solo mencionar, trae a la memoria momentos de la riquísima historia del pueblo helénico.

La cultura e historia de Grecia han aportado con grandeza a la humanidad. Basta con el título con el que también se conoce: 'cuna de la civilización occidental'. Es decir, cuna de la democracia y de la polis.

Así mismo, podemos ocupar extensos espacios enumerando los genios griegos como Sócrates, Platón o Aristóteles en lo político-filosófico; estadistas como Pericles; destacados de la tragedia griega como Sófocles, Esquilo y Eurípides; grandes poetas como Homero… Innumerables los alcances griegos en ciencias como las matemáticas y geometría (El Teorema de Pitágoras), astronomía (El sistema geocéntrico de Ptolomeo), historia (Herodoto, considerado el Padre de la historia).

LA NUEVA GRECIA. Luego de un periodo de estabilidad, Grecia se unió a Europa occidental. En 1951, nuevo miembro de la OTAN. En 1962 ingresó como asociada al Mercado Común Europeo. En 1981 ingresó como miembro pleno a la Comunidad Económica Europea. En 1996 aceptó adoptar al Euro como unidad monetaria.

Desde su ingreso a la zona Euro, Grecia se colocó debajo de la espada de Damocles económica. Esta moneda no fue confeccionada para crear y mantener una Europa unida y solidaria sino para economías fuertes como la alemana y la francesa, más para la primera.

Al ingresar a la zona Euro, Grecia dejaba de contar con palancas financieras como la devaluación de su moneda nacional para manejar las crisis. Todo ahora depende del Banco Central Europeo y, no nos digamos mentiras, de lo que impongan desde Berlín. Hay una esquina geopolítica en la crisis griega: la OTAN y los EE.UU.

EN EL FONDO, LA POLÍTICA. Washington no se puede dar el lujo de permitir el 'grexit' (salida de Grecia de la Unión Europea y por ende de la OTAN). Con solo mirar la ubicación de este país en el mapa, vemos la cercanía griega de Rusia, nación con la que el país balcánico ha mantenido buenas relaciones históricas y religiosas. Recordemos que Grecia es un país cristiano ortodoxo. Así, desde el punto de vista geopolítico, la presión estadounidense tras bambalinas debe ser muy fuerte para mantener a Grecia del lado occidental.

El gobierno del Primer Ministro Tsipras heredó la situación de crisis y, en una jugada política, le pasó la decisión de la aceptación de los recortes sociales y del gasto público, para aliviar la carga de la deuda, al pueblo griego.

Llamó a un referendo en el que ganó ampliamente, con más del 60%, el 'no' a los recortes. Con esta herramienta política, el gobierno izquierdista de Syrisa entró nuevamente en negociaciones con la Troika y aceptó el nuevo plan europeo de rescate, aún más estricto que el anterior.

¿Qué llevó a Tsipras a aceptar algo que no quería una semana atrás? Según Henry González Ortiz, docente del programa de Ciencia Política de la Universidad Autónoma del Caribe, 'el Primer Ministro griego se rindió al dyktat europeo, o tiene una carta bajo la manga que piensa sacar más adelante. El problema es que no sabemos si tiene un as'.

Amanecerá y veremos…

Durante la segunda guerra mundial (1941-1945) Grecia fue ocupada por la Alemania Nazi, Italia y Bulgaria. Al final de la misma, y por acuerdos políticos entre los aliados, el país helénico pasó a ser zona de influencia británica, con el visto bueno de Stalin y sin tener en cuenta el balance de fuerzas al interior del país. Los comunistas y partisanos dominaban en todo el territorio griego y estos pensaban que pasarían a la zona de influencia soviética, cosa que no sucedió así, dando inicio a una guerra civil: 1946-1949. Ahora estuvo al borde del abismo, otra vez. No todo está dicho en la crisis griega. Amanecerá y veremos…

Un proceso de lucha

La historia de Grecia comienza con los pobladores del grupo de islas en el Mediterráneo occidental, y en el mar Egeo, muchos siglos antes de la era cristiana. Estos pueblos alcanzan su máximo apogeo durante el mando de Alejandro de Macedonia, más conocido como Alejandro Magno, y bajo el yugo del Imperio Romano, antes y después de la nueva era. En esta época se destacan ciudades como Atenas, Esparta, Troya, Tebas, ciudades-estado más conocidas. Durante la época medieval, Grecia es enmarcada dentro del imperio bizantino, y sufre un proceso de lucha por su unificación, enfrentando a enemigos como los turcos, por el oriente; los búlgaros, por el norte; y los árabes, por el sur, entre otros.