El cadáver del fotógrafo Rubén Espinosa, que colaboraba para Proceso y otros medios, fue identificado en la morgue por un familiar el sábado por la tarde. El fotoperiodista presentaba dos heridas de bala, informó la revista.
Espinosa se había autoexiliado recientemente del estado de Veracruz, en la costa del golfo de México, donde se sentía amenazado, de acuerdo con Proceso. Su familia perdió el contacto con él el viernes, y para el sábado el grupo Artículo 19, que defiende la libertad de expresión, había pedido a las autoridades mexicanas que activaran los protocolos para localizar a un periodista desaparecido.
En su cuenta de Instagram, quedan huellas de su talento y sus asombrosas fotografías cuentan la historia de la realidad mexicana.