París ha sido una vez más testigo de la aprobación de un acuerdo. Pero en esta oportunidad el acuerdo tiene como tarea primordial salvar a la humanidad de una catástrofe de dimensiones apocalípticas. Luego de dos largas semanas de duras discusiones 195 países han sellado un trato para enfrentar el calentamiento global del planeta. El acuerdo entrará en vigor en 2020.
Las cosas no fueron nada fáciles. Las discrepancias de mayor relevancia fueron las sostenidas entre países desarrollados por un lado y China, India y algunos otros países emergentes. Estos últimos aducían que no se pueden dividir por partes iguales las responsabilidades sobre el calentamiento al día de hoy ya que los países desarrollados son los mayores responsables del cambio climático y son ellos los que deben aportar más que los demás para corregir lo que ellos por décadas han hecho emitiendo gases de efecto invernadero. Además, India sostenía que en el momento actual no estaba en condiciones de rebajar sustancialmente el uso de carbono en su economía ya que eso llevaría a una desaceleración de la misma y a no cumplir con los planes propuestos.
Más allá de las discusiones necesarias, el hecho histórico de llegar a un acuerdo sobre el cambio climático pone de manifiesto que el calentamiento global es el problema de mayor importancia en la actualidad para la humanidad. Se puso seriamente el problema sobre el tapete y ya se reconoce que existe el calentamiento y hay que enfrentarlo con medidas radicales.
La firma del mismo es importante, pero la ratificación del acuerdo por los parlamentos nacionales es el punto decisivo, ya que se espera que no pase lo que pasó con el Protocolo de Kioto que luego de firmarlo EEUU no lo ratificó.
*Master en Relaciones Internacionales y en Educación Ambiental. Docente Programa Ciencias Políticas Universidad Autónoma del Caribe.