La principal coalición opositora siria decidirá esta semana si participa en las conversaciones de paz que se reanudarán el miércoles en Ginebra, dijo el lunes el jefe de esa agrupación, en tanto que al menos 12 personas murieron durante un bombardeo en el norte de Siria a pesar de una tregua parcial.
Riad Hijab, jefe del Comité Superior para las Negociaciones, reconoció en una teleconferencia con periodistas que los bombardeos rusos han amainado desde el 'cese de hostilidades' que entró en vigencia el 27 de febrero.
Sin embargo, Hijab afirmó que el gobierno del presidente Bashar Assad no ha excarcelado a detenidos y señaló que era muy poca la asistencia enviada a las zonas en poder de los rebeldes que han sido sitiadas. La oposición había señalado tales medidas como condición para asistir a las conversaciones indirectas de paz.
La ronda más reciente fracasó el mes pasado debido a la nueva ofensiva terrestre lanzada por el gobierno sirio.
Hijab señaló que aunque los ataques aéreos rusos son menos frecuentes ahora, el gobierno sirio prosigue su ofensiva contra los rebeldes. 'Los rusos y los iraníes han causado una catastrófica situación humanitaria que está matando sirios', agregó.
Rusia e Irán son los principales aliados del gobierno de Assad desde el inicio del conflicto armado interno hace cinco años. Debido a la guerra, 250.000 personas han muerto y la mitad de la población quedó desplazada en el país.
Aviones bombardearon el lunes una localidad en poder de la oposición en el norte de Siria, donde causaron la muerte de al menos 12 personas, dijeron grupos que dan seguimiento a las acciones militares.
Las bombas dieron contra un depósito de combustible en Abu Adh-Dhohour, en la provincia de Dilib. Hijab describió el ataque como 'una matanza'.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, los cadáveres encontrados entre los escombros quedaron irreconocibles debido a las llamas sin que se sepa si corresponden a civiles o combatientes.