El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, presionó el martes a Vietnam para que permita más libertades a sus ciudadanos, alegando que respetar más los derechos humanos daría un impulso a la economía, estabilidad e influencia regional del país comunista.
'Las naciones son más exitosas cuando los derechos humanos son respetados', declaró Obama en un discurso en el Centro Nacional de Convenciones en Hanoi, sin citar expresamente los arrestos producidos durante la visita oficial que inició el lunes.
En su segundo día completo en Vietnam, Obama se reunió con activistas y emprendedores, dentro de un esfuerzo por estrechar lazos con un país de rápido crecimiento y gran importancia estratégica. La iniciativa ha incluido el levantamiento de uno de los últimos vestigios del antagonismo de la Guerra Fría: un embargo de armas introducido hace cinco décadas.
En un discurso en el Centro Nacional de Convenciones en Hanoi, Obama intentó reducir el temor a que Washington quiera dar lecciones a Vietnam en materia de derechos. El presidente ha recibido presiones de activistas para que aborde con más firmeza lo que se considera un trato terrible del gobierno vietnamita a las voces críticas con el gobierno.
'Defender estos derechos no es una amenaza a la estabilidad, sino que de hecho refuerza la estabilidad y es la base del progreso', dijo Obama. 'Vietnam lo hará de forma diferente que Estados Unidos... Pero estos son los principios básicos en los que creo que todos tenemos trabajar y mejorar'.
Obama se encontró antes con seis activistas, incluidos defensores de los discapacitados, minorías sexuales, un pastor y defensores de las libertades de expresión, prensa e internet. Sin embargo, dijo que muchos otros no habían podido acudir.
'Vietnam ha dado pasos sobresalientes en muchos aspectos', dijo Obama, señalando que 'aún quedan áreas de preocupación significativa'.
El presidente debe alcanzar un equilibrio entre el deseo de mejorar las relaciones entre ambos países y los esfuerzos por pedir cuentas al gobierno comunista por lo que los activistas describen como abusos generalizados contra disidentes.
Durante una conferencia de prensa el lunes con el presidente de Vietnam, Obama describió la relación entre ambos países como una historia de cooperación, conflicto, 'dolorosa separación' y una larga reconciliación. 'Si uno considera dónde estuvimos y dónde estamos ahora, la transformación en las relaciones entre nuestros dos países es llamativa', dijo Obama.
Sin embargo, grupos activistas han acusado al presidente de ceder su mejor herramienta negociadora para presionar a Vietnam en materia de derechos al levantar el embargo.
Vietnam tiene unos 100 presos políticos y se han producido nuevas detenciones este año, algunas en la última semana. Hanoi afirma que sólo se persigue a los que incumplen la ley.