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Un atentado suicida causó al menos 22 muertos, entre ellos menores de edad, y 59 heridos el lunes por la noche tras un concierto pop en Manchester.

Según la policía de Manchester, la poderosa explosión se produjo en el vestíbulo del Manchester Arena, un recinto con capacidad para 21.000 personas, hacia las 9:30 p.m. hora local cuando finalizaba el concierto de la cantante estadounidense Ariana Grande.

El atentado fue cometido por un hombre que hizo estallar un artefacto, precisó la policía. El ataque no ha sido reivindicado.

Numerosos niños y adolescentes asistían al concierto de la artista estadounidense. La explosión provocó pánico en la sala pero también en el exterior, donde los padres esperaban la salida de sus hijos.

Horrible ataque terrorista

La policía informó rápidamente que se trató de 'un atentado terrorista'.

La primera ministra Theresa May denunció 'un horrible atentado terrorista'.

May y su rival laborista Jeremy Corbyn decidieron 'suspender hasta nueva orden' su campaña electoral ante las elecciones legislativas del 8 de junio.

Este es el atentado más sangriento en Reino Unido desde hace doce años. El 7 de julio de 2005 cuatro atentados suicidas coordinados a la misma hora en momentos de gran afluencia en tres ramas del metro y un autobús de Londres provocaron 52 muertos y unos 700 heridos en los transportes de la capital. Los cuatro kamikazes murieron.

Hace dos meses exactos, el 22 de marzo, cinco personas murieron en Londres cuando un hombre embistió con su coche a los transeúntes que paseaban cerca del Parlamento.

El atacante, Khalid Masood, de 52 años, un ciudadano británico convertido al islam, fue abatido por la policía. El ataque fue reivindicado por el grupo Estado Islámico (EI).