Dos empleados de un banco del norte de Birmania murieron este miércoles al explotar una bomba en una oficina, anunció a la AFP un responsable de las fuerzas de seguridad, en una zona víctima de una rebelión étnica armada.
'Dos empleados del banco Yoma murieron y 13 personas resultaron heridas en la explosión de la bomba', declaró este responsable bajo condición del anonimato.
La explosión tuvo lugar en Lashio, gran ciudad del norte del estado de Shan, escenario desde hace años de un conflicto étnico armado.
La fachada del inmueble que alojaba el banco resultó fuertemente dañada, al igual que los vehículos estacionados en la calle, según testigos.
Las fuerzas de seguridad no privilegiaban por el momento ninguna pista.
El ataque se produce en un contexto político difícil para Aung San Suu Kyi, la jefa de la diplomacia y número uno del gobierno civil, quien está enfrentada a la crisis de los musulmanes rohinyás, víctimas según la ONU de una limpieza étnica por parte del ejército birmano.
Dos rebeliones étnicas armadas firmaron recientemente un alto el fuego, un relativo éxito para Aung San Suu Kyi, en un país donde el ejército y las guerrillas se enfrentan en ciertas regiones como el estado de Shan.
En los últimos días los combates entre ejército y rebeldes en el estado de Shan se intensificaron, forzando a cientos de habitantes de la región a huir de sus hogares.