Siria advirtió este viernes en Naciones Unidas que 'no tendrá otra opción' que defenderse si Occidente lanza una acción militar.
'Esto no es una amenaza. Esto es una promesa', dijo el embajador sirio Bashar Jaafari ante el Consejo de Seguridad de la ONU.
El embajador invocó el Artículo 51 de la carta de la ONU que reconoce el derecho a la autodefensa de cualquier estado si es atacado.
Si Gran Bretaña, Francia y Estados Unidos toman medidas militares, 'no tendríamos otra opción que esperar la aplicación del Artículo 51 que nos da el derecho de defendernos', señaló Jaafari.
Estados Unidos está consultando con Gran Bretaña y Francia sobre una respuesta militar conjunta a un presunto ataque con gas tóxico registrado en la ciudad de Duma, bastión controlado por los rebeldes, el cual médicos y rescatistas dijeron que mató al menos a 40 personas el sábado. Las potencias acusan al gobierno de Damasco por ello.
La embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley, expresó ante el Consejo que no Washington no había tomado una decisión aún sobre la acción militar, pero que cualquier uso de la fuerza sería en respuesta a múltiples ataques químicos llevados a cabo por las fuerzas del presidente Bashar al Asad.
Citando estimaciones de Estados Unidos de que Asad usó armas químicas 'al menos 50 veces' en el conflicto que lleva siete años instaurado en Siria, Haley dijo que 'todas las naciones y todas las personas se verán perjudicadas si permitimos que Al Asad haga normal el uso de armas químicas'.
Tanto Siria como Moscú han negado el uso de gas venenoso en Duma el 7 de abril, y el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, sostuvo que su gobierno tenía evidencia 'irrefutable' de que el ataque en esa ciudad fue una 'puesta en escena'.
El portavoz del ejército ruso, Igor Konashenkov, aseguró que se tenían 'pruebas que muestran la participación directa de Gran Bretaña en la organización de esta provocación en Guta Oriental'.