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Estados Unidos, Francia y Reino Unido lanzaron el sábado en el Consejo de Seguridad de la ONU un nuevo proyecto de resolución para investigar ataques con armas químicas en Siria, horas después de realizar bombardeos selectivos contra objetivos militares sirios.

Los tres aliados hicieron circular un proyecto conjunto de resolución que también pide envíos libres de ayuda humanitaria a Siria y demanda que Damasco se involucre en pláticas de paz bajo el amparo de la ONU, según el texto obtenido por AFP.

Las negociaciones sobre este texto, el primero ante el Consejo de Seguridad que combina los aspectos químicos, humanitarios y políticos del conflicto de siete años, deben comenzar el lunes, según las mismas fuentes.

Rusia usó en noviembre tres veces su poder de veto para enterrar una investigación anterior impulsada desde la ONU y que concluyó que fuerzas sirias habían esparcido gas sarín en la ciudad de Jan Sheijun en abril del año pasado.

La nueva propuesta instruiría a la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) reportar en un periodo de 30 días si Siria ha revelado completamente cuáles son sus reservas de armas químicas.

En el tema químico, el texto 'condena en los términos más fuertes todo uso de armas químicas en Siria, especialmente el ataque del 7 de abril en Duma'.

Prevé también crear un 'mecanismo independiente' de investigación y atribución de responsabilidades 'basado en los principios de imparcialidad y profesionalismo'.

Las acusaciones lanzadas contra Damasco por ese supuesto ataque químico en Duma sirvieron de justificativo para los bombardeos de las fuerzas estadounidenses, francesas y británicas contra los objetivos sirios.

En la dimensión humanitaria, los tres países reclaman que se instale un 'cese al fuego durable' y exigen un 'acceso humanitario sin restricción' en toda Siria y la posibilidad de 'proceder con evacuaciones médicas' de ser necesarias.

En materia política, el proyecto 'exige a las autoridades sirias que se comprometan en negociaciones intersirias de buena fe, de manera constructiva y sin precondiciones', aplicando las últimas discusiones del 3 de marzo en Ginebra.

Esas negociaciones, en punto muerto, deben abarcar asuntos como la gobernabilidad, el aspecto constitucional, las elecciones, la lucha contra el terrorismo y medidas de confianza.

Buscar el respaldo ruso

Diplomáticos occidentales dijeron que buscarían dar el tiempo suficiente para que tengan lugar negociaciones antes de que se vote la nueva resolución, con el objetivo de obtener el respaldo ruso.

Rusia ha usado 12 veces su poder de veto en el Consejo de Seguridad para bloquear acciones contra su aliado sirio.

El nuevo impulso diplomático, tras los ataques de la noche del viernes, se conoció poco después de una reunión del Consejo de Seguridad convocada por Rusia, que catalogó los ataques militares como una 'agresión' contra Siria y buscó que fueran condenados.

El intento ruso, sin embargo, falló. Pues solo China y Bolivia votaron junto con Moscú por condenar los ataques, mientras ocho países se opusieron y cuatro se abstuvieron.

Los ataques coordinados de Washington, Londres y París fueron una respuesta a la alegada utilización de armas químicas por parte del gobierno sirio en la región de Duma el pasado sábado.

La embajadora de Estados Unidos, Nikki Haley, dijo durante la reunión de este sábado que Washington estaba 'cargado y engatillado' para golpear nuevamente a Siria si se verificaba nuevo uso de armas químicas.

Haley reiteró que Washington está 'preparado para mantener esta presión, si el régimen sirio es lo suficientemente tonto como para poner a prueba nuestra determinación'.

El Consejo de Seguridad se ha reunido cinco veces esta semana para discutir sobre Siria y el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha llamado continuamente a que terminen las divisiones en torno a Siria.