Una exenfermera japonesa de un hospital de los suburbios de Tokio fue detenida como sospechosa del asesinato de un paciente, pero, según la prensa, reconoció a los investigadores haber envenenado a unas veinte personas.
Ayumi Kuboki, de 31 años, está detenida como sospechosa del asesinato de un hombre de 88 años en un hospital de los suburbios de Tokio, precisó la policía este miércoles a la AFP, pero sin dar más detalles de la investigación.
Sospechosa de haber introducido líquido desinfectante en la perfusión del paciente en 2016, fue detenida el sábado y dijo a la policía que hizo lo mismo con 'unos veinte' pacientes, según medios japoneses.
La prensa local dijo que la policía hasta ahora ha detectado la presencia del desinfectante en el cuerpo de unos cuatro pacientes septuagenarios y octogenarios muertos en el mismo hospital en esa época. Un líquido similar fue detectado en el material de perfusión utilizado.
La enfermera quiso de esa forma determinar el momento de la muerte de sus pacientes para evitar que se produjera durante su turno, precisaron los medios.
'Explicar a las familias la muerte de un familiar me era difícil durante mis horas de trabajo', declaró a los investigadores, según informó la agencia de prensa japonesa Jiji.