La economía socialista de Cuba planea reconocer en su nueva Constitución a la propiedad privada, el papel del mercado y la importancia de la inversión extranjera para el desarrollo del país.
El proyecto de reforma constitucional asegura que el sistema económico mantiene como principios esenciales la propiedad socialista del pueblo sobre los medios fundamentales de producción, pero 'añade el reconocimiento del papel del mercado y de nuevas formas de propiedad, entre estas la privada', según detalles del documento publicado en el diario oficial Granma.
La reforma de la carta magna en marcha prevé también ratificar 'constitucionalmente la importancia de la inversión extranjera para el desarrollo económico del país, con las debidas garantías'.
Cuba reanudó la entrega de autorizaciones al trabajo privado, después de casi un año de paralización, pero impuso mayores controles. Se trata de un sector que emplea a unas 591.000 personas y representa el 13% de la fuerza laboral del país.
Los nuevos controles están dirigidos fundamentalmente a las actividades de restaurantes, renta de habitaciones, taxis y construcción y reparación de viviendas, que son las de mayor ganancia y empleo de mano de obra.
Los propietarios de esos negocios tendrán que habilitar una cuenta bancaria donde se registren todas sus operaciones, pagar impuestos y justificar la procedencia legal de sus insumos.