El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llamó el martes 'perra' a Omarosa Manigault Newman, en una escalada verbal contra su exasesora y otrora 'aprendiz' en su reality show, justo cuando se publica un explosivo libro de ella sobre su experiencia en la Casa Blanca.
Omarosa, como todos la llaman, lanza sus memorias en medio de un escándalo de grabaciones secretas y acusaciones cruzadas tras dejar en enero su trabajo de 180.000 dólares anuales como asistente del mandatario.
Esta destacada mujer negra en el entorno del presidente acapara titulares desde hace días tras divulgar conversaciones privadas con el presidente y con su jefe de gabinete, John Kelly, abrebocas de un libro en el que Trump aparece como racista, mentiroso, misógino y fóbico de los gérmenes.
Trump, a quien Omarosa acompaña desde hace 15 años -primero como concursante en su programa de TV 'El aprendiz', luego como entusiasta militante de su campaña electoral y más tarde como una de sus asistentes-, ya la había tildado de 'delincuente' tras conocerse el audio de cuando Kelly le comunicó el despido, aparentemente en la blindada sala de crisis de la Casa Blanca.
Después le dijo 'chiflada', 'maliciosa', 'no inteligente', 'desagradable' y 'perdedora' al difundirse el lunes una conversación entre ambos luego de su salida de la Oficina de relaciones públicas de la Casa Blanca.
Pero el martes Trump intensificó la andanada de insultos a un nivel raramente visto incluso en él, nada propenso a escatimar epítetos contra sus críticos.
'Cuando le das un respiro a una loca y llorona delincuente y le das un trabajo en la Casa Blanca, supongo que simplemente no funciona. ¡Buen trabajo del general Kelly por echar rápidamente a esa perra!', tuiteó el mandatario.