Donald Trump volvió a enfrentarse y descalificar a periodistas el miércoles en una conferencia de prensa posterior a las elecciones de mitad de mandato, en la que se ensañó especialmente con el corresponsal de CNN en la Casa Blanca.
Trump reaccionó a un intercambio con el periodista Jim Acosta sobre el tema de la caravana de migrantes que avanza hacia la frontera de Estados Unidos proveniente de Centroamérica.
Cuando Acosta le preguntó si había 'demonizado a los migrantes' durante la campaña para las elecciones, Trump respondió: 'No, quiero que entren al país. Pero tienen que ingresar legalmente'.
Pero Acosta insistió: 'Están a cientos de millas de distancia. Eso no es una invasión', dijo, usando la palabra con la que Trump había definido la ola de migrantes.
Trump reaccionó de manera tajante. 'Honestamente, creo que deberías dejarme dirigir el país. Diriges CNN, y si lo hicieras bien, tu raiting sería más alto', dijo Trump.
Enojado con Acosta, le dijo: 'Ya es suficiente, baja el micrófono', y se alejó del atril, a lo que siguió un forcejeo entre Acosta y una asistente para recuperar el micrófono.
El periodista de la CNN, quien ya había sufrido la ira del magnate, se rehusó a cumplir su orden de entregar el micrófono y sentarse, y siguió interrogándolo sobre su visión.
'La CNN debería avergonzarse de tenerte trabajando para ellos, eres grosero y una persona horrible', le dijo el presidente.