Estados Unidos evaluó que las primeras acusaciones este jueves en la investigación de Arabia Saudita sobre el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi son 'un buen primer paso' en 'la buena dirección', al tiempo que urgió a Riad a continuar con la pesquisa.
La portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, dijo que no hubo una coordinación previa con Estados Unidos, que simultáneamente anunció sanciones contra 17 funcionarios saudíes por el asesinato. La funcionaria no descartó nuevas sanciones mientras avanza la investigación.
El fiscal general saudita pidió la pena de muerte para cinco acusados en el caso del asesinato del periodista crítico del príncipe heredero Mohamed bin Salmán, que vivía en Estados Unidos.
Según la fiscalía, Khashoggi fue 'drogado, asesinado y descuartizado' por los cinco acusados en el consulado saudita de Estambul. Sin embargo, eximió de toda culpa al poderoso príncipe heredero.
En tanto, Estados Unidos impuso sanciones económicas a 17 sauditas presuntamente involucrados, entre ellos los principales asesores del príncipe heredero Mohamed bin Salmán.