Compartir:

El presidente de EE.UU., Donald Trump, y el líder norcoreano, Kim Jong-un, dieron inicio este miércoles a su segunda cumbre en Hanói , centrada en la desnuclearización de Corea del Norte y la posibilidad de avanzar hacia el establecimiento de relaciones diplomáticas.

Los dos mandatarios se mostraron optimistas y se dieron un apretón de manos delante de una hilera de banderas estadounidenses y norcoreanas en un lujoso hotel de la capital de Vietnam.

'Creo que será muy exitosa', afirmó Trump en un breve comentario ante la prensa. Añadió que espera que la cumbre, centrada en la desnuclearización del régimen norcoreano, sea 'equivalente o mejor que la primera'.

El líder norcoreano afirmó por su parte que está 'seguro' de alcanzar esta vez resultados positivos.

'Estoy seguro de que esta vez habrá grandes resultados que serán bien recibidos por todos', declaró el líder norcoreano. 'Lo haré lo mejor que pueda para que ocurra'.

Washington exige que Pyongyang renuncie a su arsenal nuclear a cambio de un levantamiento de las sanciones pero desde el encuentro de Singapur no ha habido progresos concretos.

Luego de un cara a cara con Kim Jong Un en el Sofitel Legend Metropole, un lujoso establecimiento en pleno centro de la capital, está prevista una cena con pocos participantes.

Trump estará acompañado por su secretario de Estado, Mike Pompeo, y su jefe de gabinete, Mick Mulvaney. Kim Jong Un estará con Kim Yong Chol, su asesor de confianza que ya estuvo en la Casa Blanca, y con Ri Yong Ho, el ministro de Relaciones Exteriores.

Los dos dirigentes se reunirán el jueves para la posible firma de una declaración común de la que nada filtró hasta ahora.