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La salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE) prevista el próximo 31 de octubre 'es un momento trágico para Europa', declaró el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, en una entrevista publicada el domingo por el diario español El País.

'Va en contra del sentido de la historia y en contra del espíritu de (líder británico Winston) Churchill, que en su día abogó por unos Estados Unidos de Europa', dijo el jefe del ejecutivo europeo, que dejará el cargo precisamente el 31 de octubre.

'Creo que tenemos todavía posibilidad de llegar a un acuerdo (…) Yo no abogo en absoluto por la salida sin acuerdo. No favorece a nadie, ni al Reino Unido ni a la UE', afirmó Juncker, que califica de 'constructiva y en parte positiva' su reunión el lunes en Luxemburgo con el primer ministro británico Boris Johnson.

'No comparto la idea de quienes piensan que Johnson está jugando con nosotros y consigo mismo. Creo que está tratando de buscar un acuerdo aceptable tanto para el parlamento británico como para el Parlamento Europeo' aseguró Juncker.

El presidente de la Comisión Europea comentó que 'no (le) sorprendió' el resultado del referéndum sobre el Brexit de 2016. 

'Si llevas 40 o 45 años diciendo a la gente que la unión política es una estupidez federalista y que basta con tener un mercado común, es normal que una parte de la población acabe creyéndoselo. A eso se añadió una campana de mentiras y ‘fake news’. En la Comisión decidimos no intervenir, a petición de David Cameron (primer ministro británico de 2010 a 2016), y fue un gran error', admitió Juncker.

Interrogado sobre la crisis en Cataluña, Juncker prefirió 'no comentar los procedimientos judiciales en marcha en España', donde la justicia hará pública su sentencia a los dirigentes independentistas juzgados por su fallido intento de secesión en 2017.

'No estoy a favor de un nacionalismo estúpido, porque no lleva a ninguna parte', dice el dirigente europeo, aunque precisa que 'no es un comentario contra Cataluña'.

'Europa es un continente pequeño, que está perdiendo importancia económica y demográficamente (...) Así que no es el momento de reagrupamientos nacionalistas, sino de unir a los pueblos', explicó el presidente de la Comisión.