El padre del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, actualmente preso en Londres y amenazado de extradición a Estados Unidos por acusaciones de espionaje, afirmó este viernes en Ginebra que su hijo 'puede morir en prisión'.
John Shipton declaró ante la prensa que había visto a su hijo dos días antes 'durante las dos horas a las que se tiene derecho'.
'Julian puede morir en prisión tras nueve años de persecución por haber revelado la verdad sobre crímenes de guerra', insistió.
El australiano se enfrenta a una pena de hasta 175 años de cárcel en Estados Unidos, que lo acusa de haber puesto en peligro a algunas de sus fuentes cuando en 2010 publicó 250.000 cables diplomáticos y unos 500.000 documentos confidenciales sobre las actividades del ejército estadounidense en Irak y Afganistán.
La semana pasada, un experto de la ONU sobre la tortura, Nils Melzer, compartió su preocupación sobre el estado de salud de Assange, afirmando que 'su vida está ahora en peligro'.
El fundador de WikiLeaks está detenido en una cárcel de Londres, desde que la policía británica lo arrestara en abril en la embajada de Ecuador donde se había refugiado en 2012.
'Su estado de ánimo no parece haber disminuido, pero está muy delgado', relató su padre.
Shipton estimó que es injusto condenar a alguien por haber revelado crímenes.
'En todos los países que conozco, en Suecia, Reino Unido, Australia y Estados Unidos, ocultar crímenes es un crimen', dijo. 'No pueden enviarte a prisión por haberlos denunciado (...) Es realmente obsceno', añadió.