Una casa de subastas alemana se dispone a poner a la venta un lote de bienes personales de dirigentes nazis, incluidos artículos de Adolf Hitler, lo que provocó este jueves críticas de una asociación judía europea.
Un sombrero de copa que perteneció a Adolf Hitler, un contrato de alquiler que firmó el líder nazi, el certificado de nacimiento del que fue uno de sus más fieles aliados, Hermann Goering, son algunos de los objetos que serán puestos a la venta por la firma Hermann Historica, que ya hizo lo mismo en 2016.
'No es un llamado jurídico, sino moral' dijo el rabino Menachem Margolin, que dirige la asociación judía europea, en un correo enviado a la casa de subastas que fue publicado en el diario Tagesspiegel este jueves.
'Lo que usted va a hacer no está prohibido pero no es adecuado' añadió.
'El comercio de tales objetos simplemente no debería tener lugar', argumentó, considerando que estos efectos personales no tienen valor histórico y que serán codiciados ante todo por quienes glorifican el Tercer Reich.
Después de una controvertida primera venta en 2016, Hermann Historica planeó para el 20 de noviembre la subasta de más de cien lotes compuestos principalmente de efectos personales de Adolf Hitler, de su compañera con la que se casó la víspera de su suicidio, Eva Braun, y otros altos funcionarios nazis.
'Sí, Hitler vende', admitió el director de la casa de subastas, Bernhard Pacher. Pero estos objetos están destinados 'ante todo a clientes que abordan de manera crítica' al dictador nazi, según declaraciones reproducidas en el diario Bild.
Figura en el catálogo un sombrero de copa del Fuhrer a 12.500 euros, un contrato de alquiler de un apartamento en Múnich fechado el 26 de marzo de 1933 (a 2.500 euros) o un cuchillo de pescado y una cuchara de plata de su residencia en Berghof (750 euros).
También se ofrece un vestido de cóctel de seda negra que perteneció a Eva Braun, seis piezas de un servicio de porcelana de la esposa de Joseph Göbbels, una edición de lujo de 'Mein Kampf' que perteneció a Hermann Göering o a una postal enviada a Hitler por Rudolf Hess durante su luna de miel en 1928.
En 2016, un misterioso comprador, que se presentaba como un argentino, adquirió la mayor parte de los efectos personales nazis (calcetines, corbatas, etc.) subastados en una controvertida venta, pagando más de 600.000 euros, según los medios de comunicación.
La Junta Central de Judíos de Alemania expresó su indignación por la subasta, que calificó de 'escandalosa y abyecta'.