El nuevo coronavirus, que causó nueve muertos y contaminó a cientos de personas en China, podría mutar y propagarse más fácilmente, advirtieron el miércoles las autoridades, lo que aumentó el temor a escala internacional, ya exacerbado tras la detección de un primer caso en Estados Unidos.
El virus de la familia del SRAS, que surgió el mes pasado en Wuhan, en el centro de China, alcanzó ya a varios países de Asia y el martes se registró el primer caso fuera del continente, en Estados Unidos.
Hong Kong señaló el miércoles un primer caso sospechoso: un hombre de 39 años que llegó en tren desde la ciudad de Wuhan, epicentro de la epidemia. El resultado definitivo de las pruebas médicas se conocerá el jueves.
Un comité de urgencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) estaba reunido en Ginebra para determinar si declara una 'emergencia de salud pública a nivel internacional'.
El viceministro de la Comisión Nacional de Salud de China, Li Bin, anunció que el coronavirus ya había sido diagnosticado en unas 440 personas, en un claro agravamiento del cuadro en días recientes. En total 1.394 personas estaban bajo observación médica.
El virus, que se transmite por vías respiratorias, 'podría mutar y propagarse más fácilmente', explicó.
Las preocupaciones se agudizan ante la proximidad de las festividades y vacaciones por el Año Nuevo lunar, cuando tradicionalmente centenas de millones de chinos viajan para visitar sus familias.
Este coronavirus genera una viva preocupación por su similitud con el Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SRAS), que mató a casi 650 personas en toda la región en 2002-2003.
Los casos ya se registraron en casi la mitad de las provincias del país, incluidas las megalópolis de Pekín y Shanghái. El miércoles también se confirmó un caso en la región semiautónoma de Macao.
Ventilación, desinfección
El viceministro Li transmitió un llamado del presidente, Xi Jinping, a 'detener' la epidemia, y explicó algunas de las medidas urgentes que se tienen que adoptar.
Entre las medidas se incluye la desinfección y ventilación de aeropuertos, estaciones y centros comerciales. Los detectores de temperatura también podrían instalarse en sitios concurridos, dijo.
El gobierno chino ha clasificado este brote en la misma categoría de la epidemia de SRAS. Esto significa aislamiento para las personas diagnosticadas, y la posibilidad de determinar cuarentenas.
Xi Jinping aseguró por teléfono a su homólogo francés, Emmanuel Macron, que China había adoptado 'medidas de prevención y de control estrictas', según informó la agencia Xinhua.
'China está dispuesta a trabajar con la comunidad internacional para responder de forma eficaz a la epidemia y mantener la seguridad sanitaria en el mundo', prometió.
El miércoles, la Confederación Asiática de Fútbol anunció que los partidos de fútbol femenino clasificatorios para los Juegos Olímpicos de Tokio-2020, programados en febrero en Wuhan, fueron desplazados al este del país.
El nuevo coronavirus fue identificado originalmente en Wuhan, pero ya se registraron casos en Japón, Corea del Sur, Tailandia y Taiwán. Estados Unidos confirmó el martes el primer caso verificado en su territorio.
En el caso estadounidense, se trata de un hombre de unos 30 años, que llegó el 15 de enero a Seattle, en el noroeste del país. Él mismo llamó a los servicios médicos tras sentir los primeros síntomas.
El enfermo no visitó ninguno de los mercados de Wuhan, apuntados como el origen del coronavirus, pero sí viajó a esa región, informaron las autoridades sanitarias.
Sospechas
Hasta ahora, la OMS había utilizado el término de 'emergencia de salud pública a nivel internacional' solamente en casos de epidemias que requieren una respuesta internacional importante, incluida la gripe porcina H1N1 en 2009, el virus Zika en 2016 y la fiebre del Ébola, que devastó parte de África occidental de 2014 a 2016 y la RDC desde 2018.
El virus fue detectado en diciembre en Wuhan, donde viven 11 millones de personas, en un mercado de abastos. En este mercado se vendían animales salvajes de forma ilegal, declaró el miércoles el director del Centro Nacional de Control y de Prevención de Enfermedades, Gao Fu.
Por su parte, el alcalde de Wuhan, Zu Xianwang, pidió a los residentes que no salgan de la ciudad, y que los visitantes posterguen sus viajes en la medida de lo posible.
Se piensa que la cepa es un nuevo tipo de coronavirus, una familia que cuenta con una amplia gama de virus que pueden provocar enfermedades benignas en el hombre como el catarro, pero otras más graves como el SRAS.
La OMS criticó entonces a Pekín por haber tardado en dar la alerta y haber querido esconder la envergadura de la epidemia.