Una cirugía histórica se registró en los últimos días en Río de Janeiro, Brasil, cuando dos niños siameses que estaban unidos por el cráneo fueron separados.
La separación se logró luego de una operación que duró aproximadamente 27 horas, donde participaron casi 100 médicos de diferentes especialidades.
Arthur y Bernardo Lima nacieron hace cuatro años con sus cabezas unidas y desde entonces habían recibido atención médica casi que constante, sometiéndose a nueve cirugías antes de su separación.