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Juan Manuel Merchán, un juez de origen colombiano, se ha convertido en una figura central en el ámbito judicial de Estados Unidos tras supervisar el juicio penal contra el expresidente Donald Trump. Este histórico caso ha atraído la atención mundial no solo por la figura del acusado, sino también por la destacada trayectoria del juez que tuvo la responsabilidad de dirigir el proceso.

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Trump fue hallado culpable por un jurado compuesto por 12 personas debido a unos pagos irregulares que realizó a la actriz porno Stormy Daniels con el fin de comprar su silencio durante la campaña electoral de 2016. Ahora, recae en Merchán la tarea de dictar la sentencia correspondiente el próximo 11 de julio, fecha en la cual leerá su decisión.

Merchan, de 61 años, es un juez de origen colombiano y el primer miembro de su familia en alcanzar un título universitario. A lo largo de su carrera, ha construido una reputación de sereno y reservado, cualidades que han sido esenciales en su manejo de casos de alto perfil. Su capacidad para mantener el orden en su sala y evitar que los procedimientos se conviertan en un espectáculo mediático ha sido crucial, especialmente en un caso tan mediático como el de Trump.

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Uno de los desafíos más significativos que enfrentó Merchán durante el juicio fue mantener el control y evitar que el proceso judicial se desviara debido a la atención de los medios y las acciones del propio Trump.

De hecho, en enero pasado, Merchán tuvo que lidiar con una situación tensa cuando el expresidente norteamericano abandonó bruscamente la sala durante los alegatos finales en un juicio relacionado, el de la escritora E. Jean Carroll. La intervención del juez fue clave para restablecer el orden.

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Además, Merchán implementó medidas estrictas para regular la conducta de Trump y su equipo legal durante el juicio. Una de las acciones más notables fue la imposición de una orden mordaza a Trump, que le prohibía hacer declaraciones en redes sociales y a la prensa sobre el caso. Esta medida buscaba prevenir influencias externas y garantizar un juicio justo y equilibrado.

Juan Manuel Merchán ha demostrado ser un juez que prioriza la integridad del proceso judicial por encima del ruido mediático y las presiones externas. Su formación y su carácter lo han convertido en una figura respetada dentro del sistema judicial de Estados Unidos.

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A medida que se acerca la fecha de la sentencia, la atención de los medios y la comunidad estadounidense sigue centrada en Merchán y su capacidad para dictar una sentencia que, muy seguramente, marcará un precedente en la historia judicial del país norteamericano.