Cecil, el león más querido de Zimbabue, fue asesinado por el norteamericano Walter James Palmer. El dentista norteamericano, oriundo de Minnesota, habría pagado alrededor de unos 50.000 euros por cazar a este felino, cuya muerte ha generado una gran polémica entre los conservacionistas locales porque aseguran que la cacería se organizó de forma ilegal.












