Una marcha convocada por grupos de izquierdas y gremios profesionales a favor de la paz en Turquía terminó ayer en Ankara en el peor atentado terroristas de la historia moderna del país eurasiático, con al menos 95 muertos y 246 heridos.
Todo indica que dos suicidas detonaron dos bombas en medio de la muchedumbre, que se había reunido cerca de la estación central de trenes de la capital turca.
El primer ministro de Turquía, Ahmet Davutoglu, consideró que 'hay muy nítidas indicaciones' en ese sentido, aunque no quiso atribuir la responsabilidad del suceso a una organización.
Las bombas explotaron a las 10.04 a.m. y poco antes de la medianoche local se habían contabilizado ya 95 muertos y 246 heridos, 48 de ellos en cuidados intensivos.
Son cifras del centro de coordinación de la oficina del primer ministro, que difundió una lista de 52 víctimas mortales ya identificadas.
Según pudo constatar Efe, que estaba muy cerca de donde se produjeron las explosiones, miles de personas se estaban congregando ante la estación de trenes de la capital turca, el lugar habitual para iniciar manifestaciones en esta ciudad.
En medio de cánticos, bailes y bromas en una soleada mañana de sábado dos potentes explosiones sucesivas desataron el pánico entre los congregados, incluidos numerosos periodistas.
Las detonaciones fueron tan fuertes que hicieron estallar las gruesas ventanas del edificio ferroviario y, en segundos, cientos de personas, entre ellos este corresponsal, quedaban salpicadas por una lluvia de restos de cuerpos humanos.
'Es la peor tragedia terrorista en la historia de Turquía. Después de la explosión estuve cerca del lugar. Nunca en la vida vi una cosa igual. Había brazos, piernas y intestinos por todas partes. La gente acudió por la paz pero vieron la muerte', dijo a Efe Faruk Bildirici, defensor del lector del diario Hürriyet.
Según la agencia noticiosa estatal Anadolu, el atentado fue perpetrado con bombas fabricadas con explosivos de TNT y rodamientos de acero que servirían de esquirlas. Algunos manifestantes gritaron a coro '¡Erdogan, asesino!' en referencia al presidente Recep Tayyip Erdogan, a quien muchos acusan de exacerbar las tensiones con los curdos para sacar provecho político en las elecciones de noviembre. Erdogan ha rechazado las acusaciones.
Horas después el mismo sábado, miles de personas se reunieron cerca de la principal plaza en Estambul para condenar los ataques y señalar al gobierno como el responsable del atentado.
El gobierno turco impuso un bloqueo informativo temporal sobre las imágenes del momento de las explosiones, así como fotografías horripilantes o sangrientas o 'imágenes que crearan una sensación de pánico'.
Las dos bombas
De las dos bombas, una fue detonada en medio de un grupo de personas sin identificación política, y la otra, cerca de un punto donde ondeaban banderas y pancartas del HDP, el partido de la izquierda kurda, y de varias agrupaciones marxistas. Nadie ha reivindicado hasta ahora la autoría del atentado. El presidente turco, el islamista Recep Tayyip Erdogan, condenó el atentado, como un 'abominable ataque contra la unidad y convivencia', pero agregó que 'no se distingue en nada de los actos de terror contra ciudadanos inocentes, funcionarios, policías y soldados'.
Condena mundial al acto terrorista
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, condenó el atentado terrorista en Ankara y pidió que se lleve a los culpables ante la Justicia.
'Ban Ki-Moon espera que los responsables de estos ataques terroristas sean llevados lo más rápidamente ante la justicia', añadió.
El presidente de EEUU, Barack Obama 'expresó sus profundas condolencias personales por los muertos y heridos en estos atroces ataques', indicó la Casa Blanca.
El presidente de Colombia Juan Manuel Santos en su cuenta de Twitter indicó 'condenamos los actos de terrorismo ocurridos en Turquía. Acompañamos al pueblo turco en su dolor'.
Por su parte, 'La República Bolivariana de Venezuela expresa su más profundo repudio ante este terrible crimen terrorista en la ciudad de Ankara y hace un llamado a la comunidad internacional para prevenir y controlar el terrorismo sin dobles estándares', según un comunicado de la Cancillería.
Las autoridades brasileñas, por medio de un comunicado de la cancillería, manifestaron su 'profunda consternación' por las explosiones efectuadas para atacar una 'manifestación pacífica y democrática'.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, afirmó que el atentado que causó al menos 95 muertos y 246 heridos en Ankara es un 'intento de desestabilizar la situación' en Turquía.