Una llamada anónima informó a miembros del Ejército y el CTI de la Fiscalía sobre la ubicación de una osamenta en una zona enmontada, cercana a la avenida Circunvalar con carrera 38.
Se conoció que los restos permanecían a una distancia de la avenida, que une al norte con el sur de Barranquilla, entre los 180 y 200 metros.
Hasta esta zona entraron ayer los funcionarios del CTI de la Fiscalía para realizar las labores de exhumación de los restos que, según información entregada por el Ejército, permanecían enterrados a menos de un metro de distancia de la superficie.
El coronel José Luis Narváez, Comandante del Batallón de Policía Militar no. 2, mencionó que los soldados prestaron la vigilancia en la zona para que los peritos del CTI ejercieran sus funciones sin contratiempos.
Trascendió que entre los restos fueron halladas algunas prendas femeninas, lo que podría indicar que la víctima sería una mujer. 'Nos hace falta el cráneo y la pelvis', fue lo único que alcanzó mencionar uno de los investigadores.
Las autoridades no se pronunciaron ayer sobre el hallazgo de los restos.