Motorizados se tomaron ayer la Plaza de Soledad y las afueras del Museo Bolivariano protestando por las recientes declaraciones del alcalde Franco Castellano sobre la posibilidad de restringir la movilización del parrillero hombre ante los últimos hechos criminales en el municipio.
En la manifestación, que se se prolongó por un par de horas desde las 8:30 a.m., los motociclistas, que en su mayoría dijeron ser mototaxistas, pidieron que el alcalde desista de la medida.
Entre la multitud, un mototaxista que se identificó como Argemiro Andrade argumentó sobre la movilización: 'trabajamos en esto porque no tenemos un empleo para ganar un salario fijo, vinimos acá para hacernos sentir y buscar que la administración realice una concertación laboral sin perjudicar a ambas partes'.
Otro de los manifestantes, el mototaxista Ramón Pertuz, señaló que 'somos alrededor de 600 familias que vivimos del mototaxismo, y si firman el decreto muchos nos quedaremos sin matricular a los hijos y llevar la comida a la casa'.
En los alrededores de la Plaza y el Museo Bolivariano solo se escuchaban los pitos de la motocicletas y los gritos de los manifestantes.
Frente a esta situación, el alcalde Franco Castellanos, que cumplía con una agenda en el Museo Bolivariano en compañía del gobernador del Atlántico, tuvo que salir a atender a los manifestantes.
En su intervención, el mandatario de los soledeños les indicó que lo de la restricción debía estudiarse bien y, para eso, citaba a los voceros del gremio 'a que el próximo martes hicieran parte de una mesa de trabajo, en la cual se tomarán decisiones al respecto'.
