Al pabellón de mujeres de la cárcel Rodrigo de Bastidas, en Santa Marta, fue trasladada Carmen Barros Ipuana, la docente wayuu que fue capturada por la Policía y, según allegados, fue confundida por tener los mismos nombres y apellidos de una de las acusadas de la masacre de Bahía Portete, ocurrida hace diez años.
Según la secretaria de Asuntos Indígenas de La Guajira Yelenca Gutiérrez, un abogado penalista está al frente del caso, buscando todas las pruebas para comprobar ante un juez que Carmen Barros no es la persona que buscan.
'Estamos consiguiendo las huellas dactilares de la verdadera acusada en la Registraduría del municipio de Uribia, para recopilar todas las pruebas que permitan la libertad de la docente', afirmó la funcionaria.
Indicó además que el traslado se produjo porque en Riohacha no hay cárcel para mujeres y ella debe permanecer recluida hasta que se demuestre su inocencia.
Carmen Barros Ipuana fue capturada el pasado domingo, cuando llegaba a la Universidad de La Guajira sede Maicao, donde actuaría como jurado en las elecciones para Congreso que se llevaron a cabo en todo el país.
Se trata de una docente de 35 años, vinculada al Centro EtnoeducativoSirrumatchi, ubicado en zona rural del municipio fronterizo.
Aparentemente fue confundida, en un caso de homonimia, con Carmen Dolores Barros, Ipuana, hermana de José María Barros alias Chema Bala, extraditado por narcotráfico y condenado a 40 años de prisión como autor material de la masacre de Bahía Portete donde murieron 12 indígenas wayuu.
Las órdenes de captura que hay contra la mujer son por concierto para delinquir, homicidio con fines terroristas, lesiones personales y homicidio agravado.
Tanto la familia de la acusada, como las denunciantes en esta matanza, han confirmado que no se trata de la persona que buscan las autoridades, pero es necesario que se compruebe con todos los documentos posibles, ratificó la secretaria de Asuntos Indígenas.
