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Con la misma fiereza con la que disputaba cada balón cuando jugaba, el exfutbolista samario Jorge Bolaño negó ayer haber agredido a su esposa Zolianis Hernández, tal como lo reveló el subcomandante de la Policía, coronel Édgar Muñoz, quien lo acusó de violencia intrafamiliar y contra servidor público en los hechos ocurridos en la madrugada del martes.

Según Muñoz, Bolaño agredió físicamente a su esposa cuando esta intentaba salir del apartamento donde ambos se encontraban y luego recibió a golpes a los policías que acudieron al llamado de la mujer. También aseguró que Bolaño actuó presuntamente bajo estado de embriaguez.

Bolaño fue dejado en libertad la noche del mismo martes por el juez 15 penal municipal Daniel Corrales, quien consideró como 'desproporcionado' el procedimiento utilizado por los agentes de policía.

El exjugador del Junior, del Parma y la Selección Colombia dio ayer su versión de los hechos y considera que todo lo que se ha dicho a través de los medios está 'muy lejos' de lo sucedido. Asegura que fue agredido por los agentes de la Policía que atendieron el caso y anuncia que entablará acciones judiciales contra estos.

¿Qué tan distante está la versión que entregó la Policía de lo que sucedió?

Muy lejos. Primero, la denuncia que se presentó en la audiencia en ningún momento fue real y, segundo, fue desmentida por la persona que supuestamente yo había agredido. Soy una persona muy tranquila, tengo 18 años de estar casado, nunca he sido una persona de problemas, jugué casi 11 años en Italia y allá nunca tuve problemas con nadie, representé bien a mí país. Realmente está lejos de todo la versión de que yo había golpeado a mi esposa, porque eso en ningún momento sucedió.

¿Qué fue lo que pasó exactamente esa noche?

Estábamos en el cumpleaños mío y el de me hija Mariana (cumplen el mismo día), estábamos compartiendo con amiguitas de ella, de mi esposa, con amigas de mi hija mayor, con amigos míos. Era una reunión muy tranquila, muy amena y cuando se estaba terminando la noche, nos fuimos despidiendo. En un momento de esos estoy hablando con la mamá de las niñas y tuvimos un problema personal relacionado con la familia, nos exaltamos un poquito, pero hasta ahí. No pasó más nada. Ella, al verme exaltado, para la tranquilidad de ella y de las niñas, porque en 18 años nunca había pasado una situación de estas, lo que hace es llamar a la Policía. Yo le digo a ella que los llame, que yo los iba a esperar. Cuando los dos policías, Barbosa y el compañero, llegan, están las niñas y la mamá. Ella se lleva a las niñas del apartamento y cuando ellas cierran (la puerta) ahí empieza la agresión hacia mí. Yo respondo a esa agresión y cuando yo respondo, ellos lo que hacen es esposarme y empiezan a golpearme, y no solo ellos dos, porque llegaron al apartamento 6 u 8 policías. Hay forcejeo porque yo intentaba reaccionar, pero no podía. Y ellos, al ver que la situación se pone así, me bajan a la fuerza del apartamento diciéndome cosas fuertes. Yo les decía que me soltaran. Me meten a la patrulla, me llevan a la URI y cuando llego allá me despojan de los zapatos y empiezan a empujarme. En una oficina de un piso más arriba otra persona me golpea en la cara estando yo esposado. No entendí nunca por qué llegaron a esa situación.

¿Con qué lo agredieron en la espalda?

Tiene que ser un palo o algo que los policías tienen en su poder, porque las marcas están ahí. Y fueron golpes muy fuertes. Yo les decía a algunos amigos que la cosa más dura y horrible que he pasado en mi vida ha sido esta. Yo nunca había sentido un dolor de estos, ni cuando me metían una patada o cuando me lesionaba. Y estas marcas demuestran realmente lo que pasó.

Jorge Bolaño muestra las huellas de los golpes recibidos en su espalda. Afirma que como consecuencia de ello ha dormido poco.

¿Dónde más fue golpeado?

Tengo hematomas en la cabeza, en Medicina Legal está el informe. He tenido muchos dolores de cabeza y no he dormido bien porque los golpes fueron muy duros que todavía es la hora y me duelen.

¿Usted había ingerido licor esa noche?

Había tomado porque era el cumpleaños de mi hija y mío, estábamos en una reunión normal. Que estaba borracho o inconsciente, jamás. Todo lo recuerdo.

¿Qué sintió en la audiencia y verse frente a su esposa?

Yo tenía mi conciencia tranquila porque yo a ella nunca le he pegado. Lo que más me impactó fue el informe que dieron Barbosa y sus compañeros al fiscal, porque en ningún momento pasó eso.

¿Después de lo sucedido ha hablado con su esposa e hijas?

Con mi esposa hablé después de la audiencia, ambos lloramos y fueron momentos muy difíciles. Las niñas también están muy tristes, muy conmovidas, muy golpeadas porque han visto y han escuchado cosas que realmente no sucedieron.

¿Va a haber algún tipo de acción legal contra los uniformados que actuaron en este caso?

Pienso que es justo, porque violaron todos mis derechos. Yo me preguntaba por qué estaban haciendo eso conmigo si en ningún momento hice cosas para que me estuvieran tratando así. Me trataron muy mal, me siento, primero que todo, muy adolorido, pero segundo, muy triste porque en ningún momento tenían que actuar de esa forma.

¿Es irreversible esa decisión?

Estoy completamente seguro que se tiene que hacer algo al respecto porque todos los derechos me los violaron y, además de eso, me trataron muy mal. Nunca había sentido unos dolores como los sentí ese día, ni siquiera cuando yo ejercía mi profesión. Fueron golpes duros, que todavía es la hora y me duelen y me arden.

¿Qué enseñanza le deja todo esto?

Yo recuerdo que una vez dije que lo único que me faltaba vivir a mí era estar en la cárcel. Espero que esto me sirva no solo para mi vida personal sino profesional. Quiero dejar claro que estoy convencido de que los policías están para protegernos, hay muchos policías que hacen las cosas que deben hacer, pero los pocos policías que no actúan bien fueron los que me tocaron a mí.

Anuncian acciones

El abogado de Jorge Bolaño en este caso, Lankin Badillo Márquez (foto), anunció ayer que presentará acciones en contra de los uniformados que agredieron a su defendido. 'Cuando suceden estas situaciones generan tanto una acción penal como una acción civil y administrativa. Esta última es la disciplinaria, que se va a adelantar contra estos miembros de la Policía Nacional, pero pediré que la Procuraduría General de la Nación ejerza su poder preferente para que sea esta entidad la que investigue la conducta de estas personas. Asimismo entablaremos la acción penal y una acción administrativa ante los juzgados administrativos de Barranquilla para que le resarzan los daños y perjuicios que le ocasionaron con esta actitud, tanto en su imagen como en su humanidad'.