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Varios desmanes se presentaron en el municipio de Sitionuevo, Magdalena, este domingo durante la celebración del Día de las Madres debido a una riña que se ocasionó en una caseta y deja hasta el momento un muerto y 4 personas más heridas.

Como consecuencia, el Comando de la Policía Metropolitana de Santa Marta (Mesan), tomó la decisión de relevar a todo el personal adscrito a la Estación de Policía de la población.

La medida, encabezada por el mayor Francisco Gelvez, deja un total de 15 uniformados que serán trasladados a otras dependencias.

Los hechos

Para el coronel Freddy Tibaduiza Niño, comandante de la Mesan, todo inició con una situación que se salió de control, luego de atender el requerimiento de la misma ciudadanía ante los disturbios que se registraron la tarde del domingo en una caseta cercana al Comando de la Policía de Sitio Nuevo.

'Al llegar al lugar donde se desarrollaba la pelea, los uniformados efectivamente hallaron a 4 heridos con armas blancas, por lo que se procedió al arresto de 2 personas, señalados de ser los causantes de dichas agresiones, los cuales eran conducidos hasta la Estación de Policía para iniciar el proceso de su judicialización', relató el oficial de la Policía.

El coronel Tibaduiza indicó que 'en medio de la conducción de los indiciados, un grupo de más de 200 personas, bajo un notorio y avanzado estado de excitación producto de la desmedida ingesta de alcohol y estupefacientes, se abalanzaron en contra de los uniformados, los cuales no tuvieron más remedio que retroceder hasta el Comando de la Policía e intentar dispersar a la multitud con una bomba de humo, lo que originó la reacción contraria, pues los ánimos, ya bastante caldeados, se elevaron aún más'.

Un muerto hasta el momento

Como Eder Alfonso Cervantes Altamar, de 30 años, fue identificado por las autoridades judiciales el ciudadano que resultó muerto de un tiro por parte de un uniformado, en medio de la revuelta.

Al respecto de la muerte de Cervantes Altamar, quien se ganaba la vida como fabricante de ladrillos en Valledupar (Cesar), de donde había regresado a su natal Sitio Nuevo 15 días atrás, sus familiares afirmaron que él no hacía parte de la turba que atacó la Alcaldía Municipal y la Estación de Policía, ya que solamente se acercó a ver como se desarrollaban los disturbios, cuando terminó envuelto en un intercambio de disparos.

'Cuando vio que algunas personas disparaban contra la Estación de Policía y desde allí tiraban gases lacrimógenos, mi sobrino corrió para buscar refugio, pero el único lugar que encontró fue detrás de un palo de almendra, y fue allí donde el policía le pegó el tiro en toda la frente, a pesar que él no tiró ni una sola piedra', comentó vía telefónica Josefa Gutiérrez, tía del ladrillero asesinado.

Una lluvia de piedras, fuego y bala

Rodeados de la numéricamente superior turba, los 15 uniformados adscritos a la Estación de Policía de Sitio Nuevo se vieron cubiertos por una lluvia de piedras, mientras algunos de los agitadores intentaban prenderle fuego a la edificación que comparten con la Alcaldía. Entre tanto, otros abrieron fuego en contra de los patrulleros, lo que dio pie a la respuesta armada de los mismos causando la muerte de Cervantes, alrededor de las 7:00 p.m.

La tragedia fue superada con la llegada de los refuerzos enviados desde el Comando de la Policía de Ciénaga.

El CTI de la Fiscalía realizó el levantamiento del cadáver.