Un patrullero barranquillero que laboraba en una estación de la Policía de Itagüí, en el departamento de Antioquia, fue hallado muerto la mañana del miércoles.
El uniformado identificado como José Marcial Lizarazo Bohórquez, de 24 años, llevaba cerca de cinco años prestando sus servicios en la institución.
Linder Lizarazo Patiño, padre del agente, contó en su casa en el barrio Costa Hermosa (Soledad), que una hija suya recibió la llamada de un agente del CTI que le aseguró que su hermano se 'había suicidado'.
La noticia generó mucho desconcierto entre la familia, quienes no creyeron en esa versión.
'Pudimos hablar con un amigo de él en la estación y nos comentó que se encontraban durmiendo, cuando los llamaron a formación', comentó la hermana.
'Despertaron a José para que se cambiara y lo dejaron dentro de la habitación. Después, nos dijo, oyeron un golpe en la habitación y subieron a ver, y estaba José sobre la cama con un disparo en el ojo', agregó.
Nada oficial. El padre del patrullero dijo que ha intentado, sin éxito, comunicarse con el comandante de la estación donde su hijo ejercía sus labores.
'No fue un suicidio, de eso estoy seguro; él era un muchacho muy disciplinado, inteligente y alegre', indicó Lizarazo. 'Hace 15 días estuvo de visita, compartiendo con nosotros, sus dos hijos y su esposa, jamás manifestó algún problema'.
Lizeth Iglesias, compañera del policía, manifestó que siempre que hablaba con él 'le pedía que me contará todo y jamás me dijo algo que pudiese tener relación con un suicidio'.
El funcionario completaba dos meses en esa estación de Itagüí. Antes había prestado servicio en la central de Policía en Medellín.
