Otra de las informaciones en proceso de verificación por parte de la Fiscalía y la Dijín, dentro de la investigación por el homicidio del director regional de Medicina Legal, Eduardo Pinto Viloria, es si su asesinato no solo se habría debido al hecho de que su esposa quería separarse de él.
Esa fue la versión que el chofer de la familia Johan Beltrán Ulloque, uno de los tres capturados por el crimen, en el interrogatorio al que se sometió el domingo ante las autoridades. EL HERALDO conoció, sin embargo, que el móvil económico no se ha descartado.
El coronel Juan Carlos Nieto Aldana, subcomandante de la Policía Metropolitana, declaró de hecho este lunes que 'no se ha cerrado' la indagación. 'Eso es importante que quede claro; estamos avanzando, hay elementos que están pendientes de corroborarse sobre el rol que cada una de las personas tuvo'.
Por medio de tres fuentes que han conocido detalles de la investigación, este diario estableció que al averiguar sobre la vida laboral y personal de Pinto, la Fiscalía y la Dijín conocieron que a su nombre habían registrados dos seguros de vida: uno oficial por su cargo de director regional de Medicina Legal, y otro particular.
Las fuentes explicaron que la póliza de mayor valor, adquirida con la aseguradora La Previsora, es la que cubría su función como director regional de Medicina Legal, labor que es considerada actividad de alto riesgo en Colombia. 'Está tasada en $300 millones', indicaron.
Las indagaciones están encaminadas a establecer si ese dinero ya fue cobrado o está en trámite de reclamo por parte de Dayana Jassir De la Hoz, esposa de Pinto, que fue capturada ayer en la mañana por agentes de la Dijín, por sospechas de que fue cómplice del asesinato.
Los cabos sueltos en torno a Jassir
Los cabos sueltos en torno a Jassir fueron detectados por la Dijín y la Fiscalía días después del crimen.
'Los elementos probatorios que hasta el momento se han recaudado hacen inferir que la señora Dayana, al parecer, tuvo que ver con los hechos', dijo ayer el coronel Juan Carlos Nieto, subcomandante de la Policía Metropolitana, en declaraciones que entregó a los medios en el Centro de Servicios Judiciales.
Los investigadores recopilaron, por ejemplo, un video de una cámara de seguridad de un centro comercial que mostraban a Jassir y Beltrán en el establecimiento, un día antes del asesinato. Las imágenes daban cuenta de que la relación era más que la de un conductor con su patrona.
Las dudas se incrementaron porque, en las entrevistas que el chofer Beltrán y Jassir rindieron al principio de la indagación, ninguno de los dos se refirió a ese episodio en el centro comercial.
Fue el mismo conductor quien confirmó las sospechas: desde hacía un año, abril de 2015, mantenía un romance con Jassir De la Hoz. Y quien también terminó de comprometerla en el homicidio del funcionario.
'La relación con Dayana nace porque el esposo sufría de disfunción eréctil y por la falta de afecto. (…) La idea de matar a Eduardo nació de Dayana', aseguró Beltrán en su declaración bajo juramento.
Buscan a alias 'Ñeco'
¿Hay más personas vinculadas?
El coronel Nieto respondió este lunes a esa pregunta que, además de los tres capturados y la viuda de Pinto Viloria, las autoridades buscan a un quinto implicado en el crimen.
'Tenemos a un sujeto en fuga, quien es alias Ñeco. Estamos detrás de él en toda la región Caribe, estamos haciendo actividades de inteligencia y Policía Judicial para dar con su paradero', dijo.
En la audiencia del viernes, el fiscal del caso reveló que 'Ñeco' está identificado como Alberto Mario Cabrera Barrios, señalado por alias Chucho de haber sido el sicario que le disparó a Pinto Viloria.