Nueve meses después del asesinato en medio de un atraco del estudiante del Colegio de Barranquilla (Codeba), Juan José Montenegro Orozco, el conductor de la buseta de la empresa Coochofal en la que se transportaba, contó a EL HERALDO lo ocurrido esa vez y cómo la delincuencia tiene azotada 'la ruta' en ese sector.
'Antes de ese atraco, hacía dos semanas, me habían asaltado. Esa vez ocurrió en la mañana, dos cuadras más adelante', afirmó por teléfono el conductor, quien pidió reserva de su identidad.
El asesinato de Montenegro, de 16 años, sucedió la tarde del 17 de noviembre último en la calle 51B, con carrera 1D, en el barrio Carrizal, uno de los nueve 'puntos críticos' mapeados en el área metropolitana por la Asociación Regional de Transporte Urbano por Buses y Busetas del Atlántico (Analtra).
En la misma ruta, dos patrulleros frustraron el lunes de la semana pasada un asalto a una buseta de Coochofal, cerca de donde fue asesinado Montenegro. Ocurrió en la calle 51B con carrera 2, donde uno de los uniformados resultó herido y el atracador fue abatido por su compañero.
Nueve puntos
Edgardo Altamar, director ejecutivo de Analtra, manifestó que el viernes se reunió con el coronel José Palomino López, comandante operativo de la Policía Metropolitana, y el coronel Gustavo Chaparro, comandante de Tránsito, para informarles del aumento de robos a buses y busetas, y buscar soluciones.
Vea: Infografía: El mapa de los puntos críticos de atracos a buses
Analtra, que agrupa 26 empresas de buses, microbuses, busetas y busetones, cataloga 'puntos críticos' para el servicio que prestan al Corredor Universitario, en Puerto Colombia; las calles 17 y 30, desde Barranquilla hasta el municipio de Soledad; en la ciudad, a la carrera 21, los sectores aledaños a la parte trasera de la Penitenciaría de El Bosque, el barrio La Paz, el barrio Siete de Abril, y la calle 51B en Carrizal. Cierra el listado La Cordialidad, vía que comunica a esta capital con el centro del departamento.
'Ha habido un incremento de atracos en los buses en mayo, junio, julio y lo que va de agosto. Se han incrementado en un 25 y 30 por ciento. Nos están asaltando unos tres diarios. Es decir, al mes son unos 90 atracos', indicó Altamar a EL HERALDO.
'Maneja despacio'
Al joven Montenegro lo mató uno de los dos delincuentes que, en un sector distante, habían abordado la buseta. El conductor recordó que no vio 'nada sospechoso' cuando subieron, fingiendo ser pasajeros.
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Unos 30 minutos después, al llegar a Carrizal, uno de ellos se le colocó al lado. Le pidió, con revólver en mano, manejar despacio y no intentar nada que impidiera a su cómplice atracar a los pasajeros.
Pero no alcanzó a hurtar a todos porque, al acercarse al estudiante, se molestó y le disparó en la cabeza. 'Le preguntó que si iba a guardar el celular, pero el muchacho no dijo nada. Al parecer, cuando iba a sacarlo, el delincuente disparó. Al escuchar el tiro, pensé que había sido contra mí, pero luego volteé. Los rateros se fueron corriendo y no le robaron nada al muchacho, ni al resto de la gente', evocó.
Atracos y pérdidas. Juan Carlos Calderón, gerente de la empresa Alianza Sodis, afirmó que la Policía este año 'ha bajado la guardia' frente al hurto en buses de servicio público.
'En 2015, antes de octubre, hubo un descenso vertiginoso en el tema. Pero este año ha sido la tapa de la olla. No sé qué más hacer, me van a matar a un conductor y ese día el problema será más verraco', expresó.
Calderón indicó que, a corte del 31 de julio anterior, los conductores de los vehículos de su empresa han sido víctimas de 200 atracos, equivalentes a $18 millones 242 mil 900 en pérdidas. En el mismo periodo de 2015, lo hurtos habían sido 91, ocasionando perjuicios por $9 millones 101 mil 500.
El asalto en el que murió Montenegro y el robo que el conductor había vivido 15 días antes, hacen parte de los 154 hurtos a buses o busetas que reporta Coochofal del año pasado. Le produjeron pérdidas por $12 millones 630 mil 400, sin incluir las afectaciones a pasajeros y conductores.
Analtra informó que, hasta julio de este año, la empresa perdió $10 millones 436 mil 300 en 126 hurtos. Más del 80 por ciento del detrimento padecido el año pasado.
Aumento
El incremento del que habla Altamar se percibe en los registros de hurtos de estas dos empresas: Alianza Sodis reportó en enero 24 hurtos, en febrero 23, en marzo 20 y en abril 22. En mayo, en cambio, reportó 32 atracos, en junio 39 y en julio 40.
En enero, los hurtos a buses de Coochofal fueron seis, 11 en febrero, 10 en marzo y 19 en abril; 36 atracos en mayo, 17 en junio y 27 en julio.
El Sistema de Información Criminal (Sicri) de la Policía Metropolitana de Barranquilla registra las capturas de 27 sospechosos de atraco a buses, hasta el 31 de julio. El año pasado, para el mismo periodo, contabilizaba 22.
EL HERALDO solicitó a la Policía Metropolitana la estadística que lleva sobre la cantidad de denuncias por hurtos en buses durante 2015 y lo corrido de este año, pero la información no fue suministrada.
Cámaras
Jaime Berdugo, director del Área Metropolitana de Barranquilla (AMB), señaló que se está configurando una 'bolsa', en el marco de un proyecto para la instalación de 1.000 cámaras de vigilancia en igual número de buses, y con sus respectivos botones de pánico.
'El proyecto va por buen camino y aspiramos a que (se) inicie en el segundo semestre de este año. Esta sería la tercera parte de la flota de buses de la ciudad y su área metropolitana', afirmó.
El presupuesto que establecerían los entes estatales, según ha proyectado el AMB, serían $4.000 millones. Un aporte similar pondría la empresa privada.
Red de apoyo. En la reunión que Analtra y sus afiliados sostuvieron con los coroneles Palomino y Chaparro, los transportadores dieron a conocer las cifras sobre esta difícil situación en diferentes sectores de Barranquilla y su área metropolitana.
Altamar dijo que le manifestó a los oficiales que entiende por qué se están presentando estos atracos, 'si la asociación viene trabajando de la mano con la Policía y en diferentes oportunidades se han desarrollado reuniones para tratar los temas de inseguridad'.
El dirigente gremial agregó que Palomino les propuso 'que se fijaran unos acuerdos para que la Policía trabaje de la mano con el gremio, y de esta manera se pueda contrarrestar la inseguridad que viven algunas rutas de buses'.
En el encuentro se estableció la creación de una red de apoyo para que mejore la atención del policía del cuadrante, hacer más fluida la comunicación entre los conductores y la institución, y organizar un equipo de agentes que se encargue de registrar a domicilio las denuncias, para evitar que los transportadores demoren en presentarlas.
Estrategias
La Policía Metropolitana indicó que en Barranquilla realiza estrategias para disminuir los índices de criminalidad en la ciudad y sus municipios aledaños. 'Van encaminadas a combatir los hurtos en todas sus modalidades'. Y sobre los robos en buses de servicio público, informó que están activos los siguientes planes:
Plan Guitarra: consiste en la realización de acciones de control, identificación y registro de personas que van como pasajeras en los buses de transporte público, con el fin de judicializar a quienes porten armas de fuego ilegales o armas blancas.
Comandos situacionales: buscan identificar los puntos más vulnerables en donde hay mayor secuencia de este accionar delictivo. A través de investigadores de la Sijín, se busca dar con la captura de personas que se dedican a este delito.
Fortalecimiento de vínculos con las empresas de transporte público: trata la implementación y el fortalecimiento de los frentes de seguridad, consistentes en la instalación de cámaras de seguridad dentro de los buses que ayuda a la identificación de los delincuentes. Además de la utilización del botón de pánico, que contribuye a la captura oportuna de los criminales.
