Compartir:

El sonido de las aspas de un helicóptero anunciaba la llegada del féretro. La diagonal 31, entre carrera 29 y 33, se atiborraba de gente, entre curiosos y asistentes, que eran detenidos por un cordón de seguridad de uniformados del Esmad y la Policía, a las afueras del cementerio Calancala.

Peatones y pasajeros de los vehículos quedaron inmovilizados en la vía a las 4:50 de la tarde, por cinco minutos, al tiempo que observaban con mesura el cortejo fúnebre de Bella Rosa Celín Canedo, a la entrada del camposanto.

El cajón era cargado por ocho jóvenes. Lloraban, bebían licor y, de vez en cuando, fumaban un tabaco de marihuana. Unas treinta personas les seguían por detrás y unos doce motorizados abrían paso al cortejo fúnebre. La muerte de la adolescente de 13 años fue violenta, y aumentó a cuatro los homicidios que dejaron los enfrentamientos entre pandillas del suroccidente de Barranquilla, en la última semana.

Su fatal destino comenzaría el pasado 18 de octubre, cuando Kevin Andrés Batlle Becerra, de 19 años, intentó detener una pelea entre las pandillas ‘Los Parca’ y ‘Los Paragüitas’, en el barrio Los Ángeles I y fue ultimado de dos balazos y una cuchillada. El hecho causó repudio en redes sociales y su sepelio se realizó el jueves en el cementerio Jardines de Paz, al que asistió Bella Rosa.

Tras la inhumación del cuerpo, la joven, una amiga y otros compañeros se dirigieron al parque Borromeo de La Pradera, calle 112E con carrera 20, a tomar licor 'y pasar la pena'. De acuerdo con investigadores judiciales, hacían parte de la pandilla ‘Los Paragüitas’.

La menor departió allí hasta las 7:30 de la noche cuando al lugar llegó Juan Camilo Russil, conocido como ‘El Chino’, su expareja sentimental, y comenzaron a discutir. Según testigos, Russil le pegó un puño en el rostro a Bella. Después llegó una mujer llamada Daniela, actual pareja de ‘El Chino’, y dos amigas de esta para agredirla. Al verse en desventaja, Bella ingresó a una vivienda del sector y se armó con un palo; sin embargo, las dos amigas de Daniela, que son hermanas y fueron identificadas por vecinos como Yerlis y Viany, la violentaron con un cuchillo y una varilla. La mataron.

Ayer sábado, mientras el cuerpo de la menor ingresaba al cementerio, en medio de llantos, olor a yerba y miradas hostiles en contra de extraños y curiosos, familiares de un adolescente de 15 años esperaban su cádaver en las afueras de la sede de Medicina Legal. Las lágrimas también caían, el dolor por la pérdida de un ser querido a manos de pandilleros era el mismo. Ninguno quiso entregar declaraciones a la prensa.

De acuerdo con la versión de investigadores judiciales, a las 11:45 de la mañana del viernes José Alfredo Aguirre, de 18 años, y su hermano, de 15, se dirigían a dar el pésame a la familia de Bella Rosa. Eran amigos y sentían el deber moral de hacerlo. No obstante, en el cruce de la calle 98 y la carrera 9C, se encontraron con un grupo de pandilleros. Allegados de Bella Rosa aseguraron que se trató de integrantes de ‘Los Galácticos’.

Al parecer, estos le reclamaron por haber permitido que mataran a Bella y les atacaron con cuchillos, piedras y machetes, señalándolos de pertenecer a la pandilla ‘Los Paragüitas’.

Fueron llevados al Camino Bosques de María. El menor de 15 años fue herido con armas cortopunzantes en la cabeza, tórax y abdomen; además de golpes en diferentes partes del cuerpo. A las 12 del mediodía falleció. Su hermano José recibió dos cuchilladas en la espalda y permanece en observación.

Ocho días antes, se registró en el barrio El Valle el primero de los cuatro homicidios ocurridos por el conflicto entre pandillas del suroccidente de Barranquilla. Eduardo Luis Bolaño Rebolledo, de 20 años, conocido entre amigos como 'Coquito', a las 7:15 de la mañana fue bajado de un bus urbano y asesinado a cuchillazos y golpes por siete miembros de la pandilla Los PVC, contaron testigos.

Fue un hecho aislado a la cadena de crímenes perpetrada el 18, 19 y 21 de octubre, pero enmarcado en el problema social que, durante este comienzo de fin de año, se ha acentuado con las lluvias.

Problema en auge

De acuerdo con una fuente de la Policía, en el suroccidente de Barranquilla hoy están identificadas 52 pandillas, de las cuales ‘Los Catré’, ‘Los Cristianos’ y ‘Los Paragüitas’ son las que más repercusión tienen.

Una cifra significativa al comparar el registro de 2012: 35 grupos. En el área metropolitana de la ciudad operan unas 140 pandillas (incluyendo el municipio de Soledad), que durante 2016 han cobrado la vida de 12 personas.

'El problema es que los grupos (pandillas) se están subdividiendo. Esa situación ha dificultado el compromiso de las mismas para su resocialización. Al intentar hablar con un líder, luego hay que hablar con otros sublíderes y no todos están de acuerdo', dijo la fuente.

El director del Fondo de Seguridad y Convivencia Ciudadana, Yesid Turbay, indicó que desde hace años su dependencia atiende a jóvenes vulnerables en los barrios donde se presentan mayores eventos de riñas, lesiones personales y homicidios como lo son: El Bosque, Rebolo, 7 de abril y Las Gardenias, siendo las localidades Metropolitana y Suroccidente las más afectadas.

'Estamos fortaleciendo las estrategias de control social para atacar esta situación de fondo, e intentamos mejorar las condiciones de estos jóvenes desde las bases que influyen en la generación de estos comportamientos de violencia'.

El cuerpo de Bella Rosa fue escoltado hasta el camposanto por pandilleros y policías. Los mismos que con cada lluvia se enfrentan en la ciudad.

'Los Galácticos’ se reagruparon y quieren protagonismo'

De acuerdo con fuentes de la Policía, la pandilla de ‘Los Galácticos’, cuyos integrantes, se presume, mataron a Ronny Alberto Aguirre, hoy está conformada aproximadamente por 25 jóvenes y menores de edad.

Su radio de acción es la localidad suroccidente, pero el área en el que tienen mayor presencia es el barrio El Bosque. Suelen transportarse en los buses hasta la vía La Cordialidad, pero algunos minigrupos de la pandilla tienen conflictos con combos de otros barrios, rompiendo en ocasiones 'sus fronteras para hacer sus fechorías'.

Este grupo inició hace unos 5 años, pero se había desintegrado; sin embargo, hace dos volvieron a reagruparse con integrantes y líderes nuevos. Algunos de los antiguos fueron asesinados en venganzas y disputas y otros permanecen detenidos en centros penitenciarios.

'Han retornado nuevamente, pero, al parecer, vienen con un objetivo claro: pelear para buscar protagonismo, darse a conocer como fuertes. Ahora matan y eso es una alarma', dijo la fuente oficial.

A su vez, explicó que la pandilla de ‘Los Paragüitas’ se creó hace ocho años e incluso hay generaciones que ya no hacen parte del grupo. Actualmente está conformada por unos 20 jóvenes y menores de edad. También operan en el suroccidente de Barranquilla, sobre todo en el puesto del Paso de El Bosque. Se conoce que tienen conflictos declarados con la pandilla ‘Los Relajaos’, que también operan en el sector.

'Una mirada inicia todo': Expandillero

Brandely Romero asegura que por años perteneció a varias de las pandillas del barrio El Bosque. Hoy con 23 años se muestra convencido de que si no hubiese realizado 'una reflexión' sobre lo que quería en el futuro, quizás no lo estaría contando.

Explica que existe un patrón de comportamiento en la mayoría de los jóvenes, que cualquier cosa puede detonar un enfrentamiento entre pandillas. 'El famoso rostro con el que solemos mirar a muchos, con furia o rabia, puede ser el punto de inicio de una trifulca'.

'Esa mirada conlleva a un empujón y de allí pasar a una agresión física que lleva a que el conflicto se incremente cada vez que hay un enfrentamiento, hasta llegar a lo peor'.

Con respecto a los últimos hechos que se han presentado señala que la situación es grave. 'Antes solo se proferían heridas leves, con la intención de demostrar un superioridad, ahora cuando pelean solo buscan exterminar al otro mediante la muerte'.