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Familiares Gisselle Rodríguez Jiménez, de 19 años, quien fue herida en la cabeza la tarde del sábado, durante una pelea de pandillas en el barrio Siete de Abril, insisten en que una bala de la Policía es la causa de que se encuentre bajo observación en el Hospital General.

De acuerdo con Ana Manjarrés, su nieta presenta 'muerte cerebral' y los médicos le dicen que su condición 'es de pronóstico reservado'. Rodríguez se encuentra respirando de manera 'artificial', sin que le hayan extraído el proyectil alojado en su cráneo.

'Mi nieta se iba a asomar en la puerta, cuando recibió el disparo. Se lo atribuimos a la Policía porque ellos llegaron a disolver la pelea, haciendo disparos al aire', aseguró Manjarrés, sentada en la sala de su casa ubicada en la calle 78A con carrera 5 Sur. 'Antes de que ellos llegaran, los pelaos estaban era lanzándose piedras'.

Según vecinos, la pelea se presentaba entre las pandillas ‘los Menores’, del barrio Siete de Abril, y ‘los Calladitos’, de Santa María, en el suroccidente de la ciudad, durante el aguacero que se registró el sábado.

'La pelea no se estaba registrando por este sector. Cuando escuchamos la bulla, salimos a ver y eran los pelaos que venían corriendo porque la Policía (unos 20 uniformados) los perseguían', relató un vecino del sector. 'Fue cuando uno de ellos, que venía como parrillero, se bajó y comenzó a disparar'.

En diálogo con este medio, Karen Moreno, tía de Gisella, informó ayer en la tarde que su sobrina 'se encuentra en un coma inducido, mientras se le desinflama el cerebro'. Cuando eso suceda, será evaluada por un neurólogo y luego, el especialista decidirá si la opera para extraerle la bala.