La demora en la entrega de los cuerpos de las tres mujeres asesinadas en el barrio Garagoa, de Santa Marta, desespera a sus familiares, quienes no lo conciben.
En las puertas de medicina legal solicitan explicación al portero, pero la respuesta no les satisface pues tienen conocimiento que la tardanza es por un problema de sistematización.
Jorge Beltrán, padre de Jilry Andrea, la víctima que había naciddo en Santander, sostuvo que no es justo que además de todo el dolor que están padeciendo por el crimen, 'ahora nos tengan en este suplicio'. 'Queremos llevárnosla pronto', anotó.
Dijo que en su caso la situación es quizás más penosa, toda vez que el desplazamiento del cadáver a Bucaramanga, implica un viaje de aproximadamente 10 a 12 horas.
'Estamos muy descontentos con el procedimiento aquí en Medicina Legal', dijo.
Ya las carrozas con las cuales se hizo el contrato para el traslado de los cuerpos a sus ciudades de rigen se encuentran estacionadas en las puerta de la oficina forense. Los cadáveres cumplieron 48 horas de estar en Medicina Legal.