Compartir:

'¡Pa’ que sepan que este es el ‘violo’! ¡El ‘violo’ de la trocha, el ‘violo’ de la trocha!', grita un hombre que grabó con su celular un video que muestra los momentos posteriores a que una mujer, acompañada de policías, sorprendió a Luis Gregorio Morales Calderón en el sector donde un día antes la había violado.

Las imágenes, suministradas por un usuario del servicio Wasapea a EL HERALDO, fueron captadas en la calle 101 con carrera 42G del barrio Miramar, en el norte de Barranquilla.

La Policía Metropolitana informó este miércoles que, de acuerdo con investigaciones de la Sijín, Morales Calderón venía violando a empleadas domésticas de casas y apartamentos de Miramar, cuando salían a tomar el bus o después que se bajaban en esa zona para dirigirse a sus sitios de labores.

'Cuando caminaban por el sector enmontado al parecer eran abordadas por este sujeto, quien las intimidaba con un arma blanca para acceder sexualmente de ellas', detalló un comunicado.

La semana pasada se había presentado el último de al menos cuatro ataques sexuales atribuidos a Morales, de 43 años, quien en audiencia ante un juez admitió su responsabilidad en el delito de acceso carnal violento y por eso permanece en la Cárcel Modelo.

Coincidencia

El último caso fue conocido por investigadores de la Sijín, adscritos al Centro de Atención a víctimas de Violencia Sexual (Caivas) de la Fiscalía.

Una fuente explicó a EL HERALDO que desde el Hospital Metropolitano fue reportada la atención a una paciente que había sido víctima de abuso. Los agentes se entrevistaron allí con ella, quien les contó que un hombre la persiguió con un cuchillo en mano por la trocha de la calle 101 y, tras alcanzarla, la obligó a adentrarse en el monte, donde la accedió.

Al día siguiente la víctima instauró la denuncia y fue conminada por los detectives para ir al lugar, con el fin de que les ayudara a reconstruir la escena del delito.

Acordaron encontrarse en el sector de la calle 101 con carrera 42G, lugar al cual la mujer llegó a bordo de un mototaxi. Al arribar, sin embargo, vio al violador y llamó tanto a la Policía como a uno de los agentes de la Sijín.

Cuando llegaron patrulleros de vigilancia, la afectada señaló a Morales como el abusador. Alterada, la víctima golpeó al detenido y lo encaró. '¡Maldito, maldito!', se alcanza a escuchar que le gritaba, en medio de un llanto mezclado de impotencia y rabia.

En la requisa que le practicaron, los uniformados le hallaron al sospechoso un arma de fuego.