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En audiencia de imputación de cargos contra el policía Alis Eduardo Acosta Cantero, el fiscal 32 de la URI, Johan Cervantes Pérez, reveló que el oficial recibió $500.000 que presuntamente le entregó Marta Díaz Ospina, defensora de derechos humanos, para que hiciera unos disparos a la camioneta en la que se movilizaba y así simular un atentado en su contra.

El falso atentado, ocurrido el 24 de noviembre de 2016, dijo el fiscal Cervantes, se debió a que cuatro meses antes la Unidad Nacional de Protección (UNP) le había notificado a Díaz Ospina la decisión de retirarle el esquema de seguridad que tenía asignado para su seguridad, porque el riesgo que corría era 'ordinario'.

Ante esa información, indicó el representante del ente investigador, la defensora de derechos humanos contactó a Acosta Cantero, 'con el que pactó la suma de $500.000 pesos para que le hiciera unos disparos al vehículo blindado'.

Tras el falso atentado, siguió diciendo el fiscal, Marta Díaz colocó una denuncia en la URI de la Fiscalía por el delito de tentativa de homicidio agravado contra persona indeterminada.

Empero, en un interrogatorio que rindió ante un fiscal, el agente contó la verdad de los hechos y reconoció haber recibido el dinero entregado por Díaz.

En la audiencia de imputación de cargos realizada ayer en la sala 4 del Centro Judiciales de Barranquilla, el fiscal anunció que Alis Eduardo Acosta Cantero llegó a un preacuerdo con la Fiscalía y se convirtió en testigo de la misma, por lo que solo le fue imputado el delito de falso testimonio. El porte ilegal de armas de fuego y disparo a vehículo no fueron imputados.

El procesado fue dejado en libertad por el Juez 13 Penal Municipal ante la solicitud de su abogada defensora.