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El soldado profesional que asesinó a su esposa en el municipio de Villanueva, en La Guajira, se entregó en la sede del Grupo de Caballería Mecanizado Juan José Rondón ubicado en el sector de Buenavista, municipio de Distracción, al cual pertenecía, según informó el comando de la Décima Brigada Blindada del Ejército.

El uniformado fue identificado como Hermes Rafael Redondo Martínez, natal de Riohacha, quien llegó a la unidad militar luego de que le produjo la muerte a su esposa Adriana del Carmen Hernández Molina, de 25 años, nacida en el municipio de Plato (Magdalena).

El hecho se registró hacia las ocho de la noche del lunes en el barrio Las Delicias.

Los vecinos vieron al hombre salir en su moto después de haber discutido con la mujer, la cual según algunas versiones, quería separarse del soldado.

El sujeto dejó la puerta de la casa abierta y cuando los vecinos ingresaron encontraron el cuerpo sin vida de Adriana que al parecer fue estrangulada.

El Comando de la Décima Brigada Blindada del Ejército dio a conocer un comunicado en el que rechaza todo acto de violencia contra la mujer y 'ratifica que ese comportamiento no guarda relación con el actuar de quienes, con honor, portan el uniforme de la institución castrense. De igual forma, reitera su total disposición para colaborar con las autoridades judiciales, con el fin de esclarecer lo ocurrido'.

Agrega que después que el soldado profesional Redondo Martínez, se presentó en su unidad comenzaron las gestiones para ponerlo a disposición de la Fiscalía General de la Nación con el fin de garantizar su comparecencia al proceso.

Adriana y Hermes eran pareja hace 7 años y tenían dos hijos menores de edad.

Según vecinos del sector, las discusiones entre los dos eran constantes, porque él le prohibía salir y era celoso.

La pareja ya se había separado pero después de algún tiempo decidieron darse una oportunidad y estuvieron en tratamiento psicológico, pero al parecer no funcionaron las cosas, por lo que ella quería separarse.

Los padres de la víctima eran desplazados por la violencia desde Plato y trabajan en una finca cercana al casco urbano de Villanueva.