Agentes de la Sijín, luego de una investigación de 10 meses, hicieron efectivas 20 ordenes de captura por los delitos de concierto para delinquir, hurto por medios informáticos y daño informático, a 19 integrantes de una banda delincuencial conocida como ‘los Informáticos’.
Esta banda operaba en Barranquilla, Sincelejo y Santa Marta y se especializaba en el robo de cajeros automáticos. La Policía estima que han robado un aproximado de 1.600 millones de pesos, es decir 62 millones mensuales entre 2015 y 2017.
Utilizaban la modalidad del ‘cambiazo’, la cual consiste en grupos de cinco personas cada una con un rol específico durante la acción delictiva.
El ‘vandalizador’, como le llaman los investigadores del caso, se encarga de hacer que el cajero automático no funcione.
En algunos casos, esta persona coloca un pegante en la ranura lectora de tarjetas. De esta forma no se bloquea la tarjeta en el cajero.
El encargado de esta parte de la organización debe dañar el botón de cancelar, para que de esta forma el cliente no pueda cancelar la transacción que más adelante hacía otro de los integrantes de ‘los Informáticos’.
Luego, el ‘cambiador’, quien se encuentra en la fila del cajero junto a la víctima, espera a que esta salga.
Entra como un usuario más y hunde uno de los botones que permiten hacer transferencias bancarias sin la necesidad de tarjetas.
De inmediato llama de vuelta a la víctima. El ‘cambiador’ hace creer a la persona que hubo un problema en la transacción y que es por esto que no ha terminado aún.
Durante esta supuesta ayuda que le brinda, revisa la clave de la cuenta de la persona.
Cuando esta se descuida, saca de su bolsillo una tarjeta del mismo banco que la del usuario. Las reemplaza cuando el usuario está distraído intentando cancelar la transacción.
Cabe resaltar que en esta modalidad de robo, el cliente pierde la facultad de recuperar el dinero cuando permite que alguien no autorizado por la institución bancaria le ayude.
Posteriormente, el ‘transporte’ se lleva las tarjetas que recoge el ‘cambiador’.
Se dirige a un cajero de la misma entidad bancaria cercano en donde la persona conocida como el ‘retiro’, saca el tope máximo de dinero en efectivo que se pueda sacar de la cuenta.
En algunos casos la misma persona que engaña al usuario extrae el dinero de la cuenta.
Así también va a cajeros de otros bancos que permiten retirar dinero y hace el mismo procedimiento. Estas personas incluso compran artículos en comercios hasta que la cuenta no tenga saldo.
Los ‘bodegueros’, el último elemento de la cadena, aportan su cuenta bancaria y cédula para que los criminales puedan realizar transacciones virtuales y consignaciones a estas cuentas.
Estas personas, de acuerdo con fuentes policiales, son en muchos casos de bajo recurso y reciben una suma que oscila entre los '$50.000 y los $60.000'.
Las autoridades estiman que esta banda lleva funcionando desde 2010.
En el procedimiento judicial, la Policía incautó 74 tarjetas crédito y débito, 6 celulares y dos vehículos.
Los capturados fueron dejados a disposición de La Fiscalía Primera de Estructura de Apoyo Barranquilla.
Así operaban: