En el pabellón de quemados de la clínica Reina Catalina permanece Fernando Antonio Castro Escorcia, el joven de 25 años a quien le rociaron gasolina y le lanzaron una mechera encendida por la espalda, en medio de un acto de intolerancia ocurrido durante el puente festivo en Soledad.
Mary Luz Escorcia, madre del joven, manifestó que su hijo se encuentra en delicado estado de salud debido a las quemaduras que sufrió tras el ataque.
Sentada en un muro de la entrada principal del centro asistencial y a la espera este martes de un parte médico alentador, la mujer reconoció que su hijo tiene un problema de 'adicción a las drogas' y que desde el pasado mes de mayo, fecha en que escapó del centro de rehabilitación Alfa y Omega del barrio Siete de Abril, este vive en la calles.
Precisamente en una zona residencial del barrio Hipódromo ocurrió la tarde del domingo el ataque contra Fernando. El autor, según Escorcia, fue un hombre identificado con el apodo de ‘El Pollo’. El sujeto habría ocasionado las quemaduras a su hijo luego de que este evadiera el pago de $2.000 que le adeudaba.
'Ese señor tiene como unos 44 años y también vive en la calle. Me comentaron que anda con un frasco de gasolina y otro de ácido para atacar a la gente', expresó Mary Luz Escorcia.
Con esto, continuó la mujer, busca que las autoridades policiales tomen los datos suficientes para dar con el paradero del atacante de su hijo.
La madre aseguró vivir en el barrio El Pueblito de Barranquilla con los otros cuatro hermanos de Fernando. Dijo que este ronda siempre el municipio de Soledad porque una tía llamada Damarys reside en el barrio El Parque.
Señaló que se enteró de toda esta situación después de recibir la llamada de su hermana. A ella le avisaron que a su sobrino lo habían 'prendido' en medio de una riña.
Desplazamiento
Mary Luz también contó que por el actual estado de salud de su hijo y el hecho de que hubiese preferido la calle y no los estudios la hacían sentir tan agobiada que, según ella, se asemeja mucho al momento vivido en 2004,cuando tuvo que salir huyendo con Fernando Antonio y el resto de sus hijos de la comuna 16 de Medellín, especialmente de los sectores de Belén y Altavista donde reinaba el poder de las extintas AUC.
'Nos vinimos para la costa desplazados por la violencia, por el paramilitarismo. Vivimos un tiempo en casa de mi hermana y después nos fuimos para el barrio El Pueblito', apuntó la mujer.
Estado de salud. Fernando Antonio Castro fue llevado inicialmente al hospital Materno Infantil de Soledad una vez sucedió el ataque. Posteriormente lo remitieron a la Reina Catalina, en el norte de Barranquilla. Fuentes médicas señalaron que este presenta quemaduras de segundo y tercer grado en el 50% de su cuerpo.