Ginna Margarita Ricardo Cantillo y Juan Carlos Agámez Pájaro, la pareja señalada por la Fiscalía de estafar a 28 personas que buscaban comprar viviendas, tenían programada para el día de ayer la audiencia de acusación.
No obstante, la diligencia judicial fue aplazada para el 11 de diciembre. La razón: Juan Carlos Agámez no fue llevado al Centro de Servicios Judiciales del centro de Barranquilla. Al acusado, teniente de la Policía al momento de su captura, le había sido dictada medida de aseguramiento en establecimiento carcelario que cumplía en la cárcel de Sabanalarga.
O al menos así se presumía desde el despacho del juez de conocimiento encargado del caso, pues su abogado defensor comunicó al togado en la mañana de ayer, a la hora que estaba programada para comenzar la diligencia, que su cliente había sido 'trasladado a la cárcel de Corozal semanas atrás'.
Para la diligencia reprogramada, 'se ordena pedir al detenido a la cárcel de Sabanalarga, Corozal y todas las que sean las del caso', lee el acta de aplazamiento expedida.
Por su parte, Ginna Cantillo permanece en la cárcel El Buen Pastor.
Los delitos de los que son señalados son estafa mayor cuantía, falsedad en documento privado y público, y captación masiva de dinero habitual. Las autoridades estimaron la suma de la estafa en $1.527 millones.
Las presuntas víctimas que los demandaron aseguraron haber girado sumas que oscilan entre los 30 y 100 millones de pesos por viviendas en remate que presuntamente ofrecían a través de la empresa Casadores Inmobiliarios S.A.S.
