Yeudith Karina Martínez Mejía, la falsa médica condenada a cinco años de prisión por homicidio, quien ordenó aplicarle penicilina a un paciente alérgico en la clínica Porvenir de Soledad, que a causa de esto falleció, estaría involucrada en otros procedimientos de este tipo.
EL HERALDO estuvo en el municipio de Cicuco (Bolívar) y conoció que la falsa médica atendió a varios pacientes en el hospital local, donde laboró siete meses en 2013.
Uno de los casos que atendió Martínez Mejía fue el de un niño de un año de nacido, quien ingresó al hospital con una parasitosis, según contó Claudia Turizo Puerta, tía del menor. El deceso del pequeño se registró el 13 de enero de 2013.
La mujer asegura que ella y la mamá del menor, Zaideth Agámez, le informaron a la falsa médica que el niño tenía parásitos. De inmediato, Yeudith le recetó un purgante para que, supuestamente, los expulsara.
Asegura Claudia Turizo que luego de ingerir el laxante, el infante se empezó a hinchar y a tener problemas de respiración. 'En vista de cómo se puso mi sobrino, lo llevamos otra vez al hospital pero la doctora nos decía que nos regresáramos para la casa, que apenas los expulsara se iba a poner bien, y así hicimos varias veces, pero nos pusimos bravas con ella y así fue que lo dejó hospitalizado', recuerda la mujer.
En vista de que el menor no presentaba mejoría y no expulsaba los parásitos, madre y tía le pidieron a la falsa médica que lo trasladara al hospital de Corozal, pero ella les decía que no era necesario y así estuvo en el centro médico durante siete días.
Cuando por fin lograron que Martínez ordenara el traslado a otro centro asistencial, los médicos les informaron que el niño había llegado con muerte cerebral.
'Allá nos preguntaron qué medicamento había tomado el bebé y les dijimos que un purgante, entonces un médico nos dijo que ese medicamento le había matado los parásitos en el estómago y por eso fue que no pudieron hacer nada por él', dice la tía con melancolía.
Claudia Turizo señala que cuando Yeudith Martínez ordenó el traslado de su sobrino al hospital de Corozal 'lo hizo sin canalizarlo siquiera'.
'No le quería dar la remisión y además que le dio ese purgante y lo que hizo fue matar al bebé porque los parásitos, en vez de expulsarlos, se le pudrieron en el estómago'.
El niño era el menor de tres hermanos. A raíz de su fallecimiento, Zaideth Agámez decidió irse a vivir a El Coco, en Tiquisio, sur de Bolívar, en tanto que su expareja, que se dedica a la pesca, reside en Cicuco.
