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Un niño de siete años jugaba junto a sus amigos en la carrera 35B con calle 8A del barrio Rebolo. De repente, un pistolero que se movilizaba en una moto llegó e hizo varios disparos en contra de una casa. Uno de estos alcanzó al niño de siete años en el dedo de la mano izquierda.

Con este caso, son cinco los niños que han recibido daños colaterales en riñas entre adultos. Dos de ellos han muerto, mientras tres han resultado heridos.

Aún se desconoce el porqué de lo ocurrido a las 7:00 de la noche del martes pasado al sur de Barranquilla. La Policía, a través del comandante del Distrito 3, el capitán William Vargas, manifestó que se encuentra en indagaciones pero que han podido establecer que la intención de alias Kener, quien disparó, 'no era herir al niño' y que fue 'una bala perdida' lo que lo alcanzó.

Algunos vecinos tuvieron versiones encontradas con respecto al hecho. Uno afirmó que se trató de una problemática a raíz de un arma. 'El papá del niño se había quedado con una pistola del otro, por eso se formó el problema, porque el de la moto llegó a reclamarle haciendo tiros', contó el testigo que pidió reserva de su identidad.

Por otra parte, otro aseguró que se trató de un hombre borracho que hacía tiros al aire.

La víctima fue trasladada por su tío al Hospital General de Barranquilla. De allí fue remitido al Camino Suroccidente, donde le fue extraído el proyectil de su mano izquierda.

El gerente encargado de MiRed IPS, Freddy Bojanini Morrón, manifestó que 'el disparo comprometió la primera falange y el metacarpiano'. Y aún cuando 'tuvo fractura y compromiso muscular' el equipo médico puso salvar el dedo pulgar del niño, a quien le espera una recuperación de entre 4 a 6 semanas.

Las alertas en casos en que menores de edad resultan víctimas de la violencia están prendidas. En abril pasado, el ICBF publicó un informe en el que detallan la atención diaria de al menos 66 casos de violencia contra niños y adolescentes a nivel nacional.

No obstante, en dos semanas, en Barranquilla y Soledad ya se registraron cuatro casos.

El primer hecho

El 18 de abril en el barrio Ciudad Bolívar, un niño de un año y siete meses recibió un impacto de bala en la espalda luego de la incursión de sicarios a las cercanías de su casa.

De acuerdo al recuento que hizo en su momento la tía del menor, la familia Mendoza Fuenmayor, inmigrantes de Venezuela, se encontraban en el patio de su casa cuando vieron una moto que se detuvo. Los tripulantes de esta abrieron fuego en contra de un grupo de jóvenes que departía cerca de un arroyo contiguo a las viviendas.

Por este delito fue detenido Azel Hernández Pérez, quien de acuerdo con la Fiscalía era el conductor de la motocicleta. El hombre fue asegurado en la cárcel Distrital El Bosque.

Segundo caso

Luego, el 20 de abril, la prima del futbolista Teófilo Gutiérrez falleció tras ser alcanzada por el proyectil de un arma de fuego cuando jugaba en la terraza de su casa.

En el atentado que ocurrió a las 9:05 de la noche en la carrera 52 con calle 22 del barrio Vista Hermosa de Soledad también murió Claudia Ester Sierra Sánchez, de 34 años.

El atentado en el que murió la niña de dos años iba dirigido, según la versión que manejan las autoridades, contra el conductor de un motocarro que en ese momento pasaba por el frente de la casa. Por el responsable de este hecho, las autoridades ofrecen hasta 30 millones de pesos.

Doble atentado

Jaison Molina Tarrifa se encuentra en la Penitenciaría El Bosque por atentar en contra de Pedro Pablo Martínez Zapata, su hija y su nieta en hechos ocurridos el pasado 27 de abril en el Centro de Barranquilla.

El ataque en contra del comerciante de 45 años fue perpetrado en la calle 30 con carrera 40 a las afueras de una bodega propiedad del herido a la 1:30 de la tarde.

Las niñas de 12 y 10 años resultaron heridas en el cuero cabelludo y en el glúteo, respectivamente, luego de que el sicario desenfundara su arma de fuego e hiciera varios disparos. Martínez recibió tres disparos, en el abdomen, la pierna derecha y el hombro izquierdo, y se encuentra en un centro asistencial de la ciudad bajo pronóstico reservado.