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En audiencias de imputación de cargos y solicitud de medida de aseguramiento realizadas ayer contra los tres individuos capturados por el asesinato de la comerciante sabanalarguera Carmen María Mulford Machado, el fiscal del caso, Elkin Chiquillo, reiteró lo expuesto en la diligencia de legalización de captura sobre el rol de cada uno de los implicados en el hecho de sangre ocurrido el pasado martes 29 de mayo.

En su intervención, Chiquillo, fiscal Segundo especializado de Alertas Tempranas de la URI, leyó ante el juez 16 Penal Municipal con funciones de control de garantías, Harold Meza Galván, el contenido de la investigación preliminar contra Manuel Antonio Montenegro Cabarcas (presunto autor material del homicidio), Kevin Andrés Blanco Corredor (conductor del taxi) y Jesús David Narváez Martínez (copiloto).

Una testigo presencial de los hechos, sobrina de la víctima, fue la que identificó a Manuel Antonio Montenegro como el hombre que disparó contra Mulford Machado una vez tomó sus pertenencias.

El caso, de acuerdo con lo expuesto por el fiscal, ocurrió a las 11:00 de la mañana de aquel martes, luego de que la mujer saliera del Banco de Bogotá de la calle 47 con carrera 20 con 10 millones de pesos que había obtenido de un préstamo.

'La víctima y sus acompañantes llegaron hasta un negocio de la calle 37 con carrera 21 para comprar unos elementos asociados al juego de billar. El conductor de la mujer descendió de la camioneta y se dirigió al negocio. En ese momento se acercó Manuel: abrió la puerta, tomó el bolso y luego disparó. Manuel sabía que iba a matar a la señora para asegurar el producto', expresó el fiscal, en medio de la imputación.

Además de eso, el representante del ente investigador afirmó que a la víctima 'se le acechó y se le disparó en forma despiadada'.

Una vez cometido el ataque, según relató el fiscal, Manuel Montenegro volvió a montarse en una motocicleta y, cuadras abajo, abordó el taxi de placas SDS-857 que era conducido por Kevin Andrés Blanco Corredor.

Tras una persecución policial, en la calle 22 con carrera 28 del barrio Rebolo, fueron interceptados por los uniformados.

En el informe policial, agregó el fiscal Chiquillo, los agentes que realizaron el procedimiento de captura dejaron claro que Manuel Montenegro descendió del automotor e intentó esconderse en una vivienda cercana. Además, informaron que Jesús David Narváez, quien iba de copiloto era quien tenía en su poder el teléfono celular de la víctima más un millón 320 mil pesos en uno de sus bolsillos, al parecer, dinero que le había sido quitado a la mujer.

'Cómo se descubre que estas personas estaban involucradas en el caso, señor juez…Pues uno de los policías que intervino en el procedimiento de captura activó el celular que tenía en su poder Jesús Narváez y como protector de pantalla estaba la fotografía de la señora Carmen María Mulford Machado. Esa fue una prueba contundente contra los sospechosos', precisó el fiscal Chiquillo.

Luego de la intervención, el mismo fiscal precisó los tres delitos por los que sindican los capturados: homicidio agravado, hurto calificado agravado y tráfico, fabricación y porte ilegal de arma de fuego y municiones.

'Aunque uno solo (Manuel Montenegro) disparó a la víctima, los tres son coautores de los delitos mencionados porque hacen parte de una empresa criminal y orquestaron el hecho, seguramente con la participación de más personas', anotó el representante de la Fiscalía.

A su turno, los tres detenidos no aceptaron los cargos imputados.

A la Modelo

Una vez finalizó la intervención de la Fiscalía en la audiencia de imputación, los abogados defensores de los capturados manifestaron no tener recursos contra los señalamientos de la autoridad.

En la audiencia de solicitud de medida de aseguramiento, los defensores solo sugirieron al juez que, en caso dado de que se tomara la decisión de una medida de aseguramiento intramural, se hiciera en la cárcel Modelo de Barranquilla.

Después de la intervención del juez 16 penal este ordenó el traslado a un centro de reclusión para los tres fleteros. En este caso acogió la solicitud de los abogados y los envió a la cárcel del corredor de la Vía 40.