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En operativos de verificación de identidad y antecedentes adelantados este viernes en el barrio El Ferry, fue aprehendido Gerardo Rafael Borrero Díaz, de 39 años, quien luego de constatar su identidad en una requisa, se comprobó que tenía vigente una orden de captura por el delito de homicidio agravado.

De acuerdo con el reporte de las autoridades, Borrero Díaz habría sido el presunto homicida de un carricochero venezolano identificado como Marco Tulio Jugo Portillo, en hechos ocurridos el pasado 6 de mayo del presente año.

Crimen motivado por los celos

Según testimonios recopilados por investigadores judiciales, el móvil del crimen de Jugo Portillo, quien era oriundo de Maracaibo, Venezuela  sería un presunto romance entre la víctima y la expareja de Borrero Díaz.

En su momento, un vecino declaró que Jugo Portillo les había hecho una terrible confesión.

'Cuando él cogió confianza nos contó que un tipo lo estaba buscando para matarlo por andar con su mujer, a pesar de que ellos se habían dejado hacía cinco meses. Nosotros lo ayudamos para que no lo encontraran, porque él nos decía que vino a trabajar dignamente para mandarles dinero a los dos hijos pequeños que había dejado en Venezuela', señaló la fuente que quiso mantenerse en el anonimato.

El hecho

A las 10:15 de la mañana del pasado domingo 6 de mayo, cuando los inquilinos desayunaban, Marco recibió una llamada de la novia quién le comentó que su expareja lo estaba buscando para matarlo. Le dijo además que se cuidara porque su victimario estaba averiguando su paradero.

'Marco le pidió que la informara si el marido andaba armado', agregó el vecino que habló con esta casa periodística.

De acuerdo con los testigos, Jugo Portillo les pidió a sus compatriotas que le guardaran el carricoche, mientras él se ocultaba.

Sin embargo, Borrero Díaz logró ubicar la pensión en la que permanecía la víctima, y presuntamente llegó al sitio a hacer 'inteligencia'.

'Marco tuvo que saltar la paredilla del patio y esconderse en una casa vecina para salvar la vida', señaló un vecino que presenció el hecho, y agregó 'cuarenta minutos después de este incidente, el venezolano regresó convencido de que había burlado al atacante, pero este lo esperaba escondido en una esquina, y cuando tuvo la oportunidad lo atacó', dijo en su momento la fuente.

Jugo Portillo recibió seis puñaladas presuntamente a manos de Borrero Díaz, quien al parecer escapó caminando y después como parrillero en una motocicleta.

Se tiene previsto que en las próximas horas el detenido sea presentado ante un Juez de control de garantías en el Centro de Servicios Judiciales de Barranquilla, para que responda por el delito de homicidio agravado.