Bajo anonimato, una vecina de la funcionaria de la Defensoría del Pueblo, Dignoris Pérez, narró cómo resultó esta atacada a bala en un supuesto intento de sicariato ocurrido la mañana de este viernes en el barrio Lucero.
El testimonio, entregado por la mujer a este medio de comunicación, también fue escuchado por los uniformados de la Policía Metropolitana que custodian la escena en la calle 52 con carrera 31.
'La abogada salió a recoger su carro, dijo los buenos día y dio algunos pasos. Yo entré a la casa y, en menos de un minuto, se escucharon los dos disparos. Ella quedó tendida en el piso y tenía los tiros en la mejilla izquierda', relató la vecina de la víctima.
Posteriormente, la mujer señaló que 'a ella no le robaron nada, pues otra vecina fue la que recogió su cartera del piso y la guardó'.
Sobre el criminal, la testigo solo indicó que 'llegó a pie hasta el lugar' y luego del ataque 'salió corriendo hacia el Cementerio Calan Cala, buscó la 33 y ahí se montó en una moto'.
En cuanto a Dignoris Pérez, su vecina señaló que fue auxiliada por otros habitantes del lugar y fue trasladada a un centro asistencial en una patrulla de la Policía que, casualmente, pasaba por el sitio.
Las pesquisas
Las autoridades policiales hasta el momento no han manifestado con qué guarda relación el hecho criminal de la defensora. Sin embargo, una de las líneas investigativas tomadas por los detectives es establecer si el caso tiene algo que ver con el cargo que ejerce esta como funcionaria del organismo.
Precisamente, la Defensoría del Pueblo envió un mensaje a través de su cuenta institucional de Twitter en el que se refieren al caso de la funcionaria. 'Rechazamos atentado contra funcionaria de Regional Atlántico, Dignoris Pérez, quien resultó herida tras recibir impacto de bala mientras salía de su residencia en
Barranquilla. @DefensoriaCol exigen esclarecer los hechos'.
En abril del año anterior, la Fiscalía ordenó el arresto de la pareja de Pérez, el policía Alis Eduardo Acosta Cantero por un caso de falso testimonio.
En su momento, según las investigaciones de la Fiscalía, el uniformado recibió $500.000 que presuntamente le entregó Marta Díaz Ospina, defensora de Derechos Humanos y líder de la Asociación de Familias por un Solo Dolor, Afusodo, para que este 'le hiciera unos disparos a la camioneta en la que se movilizaba y así simular un atentado en su contra'.
Con el falso atentado, ocurrido el 24 de noviembre de 2016, aseguró la Fiscalía, se buscaba que la Unidad Nacional de Protección (UNP) no le retirara el esquema de seguridad que Díaz Ospina tenía asignado para su seguridad, porque el riesgo que corría era 'ordinario'.
Frente a ese proceso, el agente preacordó con la Fiscalía y se convirtió en testigo en contra de Díaz Ospino y recibió el beneficio de libertad.