Luego de una pausa de cuatro días, se reanudaron en el día de ayer en el Centro de Servicios Judiciales las audiencias de imputación de cargos contra el exrector de la Universidad Autónoma del Caribe Ramsés Vargas Lamadrid y nueve exfuncionarios de la alma mater procesados por los delitos de concierto para delinquir con fines de enriquecimiento ilícito, estafa agravada, falsedad en documento privado, administración desleal, corrupción privada y amenaza.
La delegada de la Fiscalía Tercera Especializada adscrita al Gaula, Faizulis Montes, explicó en la imputación de cargos que el exrepresentante legal de la Universidad Autónoma del Caribe y jefe de servicios informáticos Efraín Maldonado Palma amenazó a funcionarios de la corporación para que, al parecer, faltaran a la verdad en las diligencias de interrogatorio e investigación que adelantaban la Fiscalía y el Ministerio de Educación. 'El 5 de febrero, en conversación sostenida con María José Collante Vargas, Cindy Solar Vargas y una mujer llamada María Andrea, Maldonado Palma señaló que no le cuesta mandar a matar a cualquier persona que lo vaya a traicionar… por que matar a una persona es full económico', leyó la fiscal Montes ante el juez Séptimo Penal Municipal con funciones de control de garantías, Camilo Pardo, y los abogados defensores de los procesados.
De acuerdo con la fiscal, Maldonado Palma suscribió fraudulentamente pagarés por $1.200 millones, $396 millones, $350 millones y $166 millones a favor de la empresa de inversión privada B y V Comunicaciones Estratégicas de propiedad de Jorge Eduardo Vera Kitt. 'En los hallazgos detectados por el Ministerio de Educación se encontró que actualmente la universidad tiene una deuda con la empresa de Vera Kitt por $5.000 millones', explicó la fiscal Montes que le imputó los delitos de concierto para delinquir agravado, falsedad en documento privado, corrupción privada, administración desleal y amenaza contra testigos. Cargos que no fueron aceptados por el procesado.
'Ramsés es peligroso'
A la procesada Laura Laíno García, quien fungía como docente de la facultad de administración de empresas y ciencias contables de la universidad, la fiscalía le comunicó que la investiga formalmente por el delito de amenaza. 'Se trata de un recado o una amenaza implícita del 4 de octubre a las 7:00 de la noche; Laura Laíno le dice a Yesenia Medina, abogada de la corporación, que recibió una llamada de Ramsés preguntando que cómo iban las investigaciones y que él sabía que ella estaba aportando información jurídica a la Fiscalía', leyó la fiscal del reporte de la interceptación telefónica, y agregó que 'la abogada Medina le respondió a Laura si es un mensaje de parte del señor Ramsés, que no le entendió, a lo que Laura señala que ella sabía cómo era el señor Ramsés, que era un hombre peligroso y que era mejor apartarse de todo eso, dándole a entender que tuviera en cuenta el mensaje y no prestara colaboración alguna con la Fiscalía', explicó la fiscal. Sobre este hecho, la detenida negó los cargos imputados por la Fiscalía por el delito de amenaza.
