Orlando Jiménez, el esposo de Arletys María Vargas Bovea, de 46 años, asesinada por su hijo adolescente de 17 años en el barrio 7 de Abril, narró que con frecuencia el matricida agredía verbalmente a la mujer. El hombre reconoció que el homicida, quien fue capturado, tenía problemas con el consumo de alucinógenos.