En la continuación del juicio por los autopréstamos por los que es procesada Silvia Gette, exrectora de la Universidad Autónoma del Caribe, la mujer no aguantó más y rompió en llanto cuando era cuestionada por el delegado de la fiscalía 13 de la Dirección Nacional contra el Lavado de Activos.
La mujer fue sometida a interrogatorio donde explicó que, según ella, su única intención era 'hacer grande la universidad que era la obra de su esposo'.
'Yo sé el amor que él le tenía a la universidad y todos los puestos públicos que rechazó por cuidarla...cuando yo la tomé, era una universidad normal que tenía entre 8 mil y 9 mil estudiantes, yo también quería hacerla grande... Las universidades no son de nadie, porque son instituciones sin ánimo de lucro, pero uno ama lo que hace la persona que uno amó, porque era la obra de mi esposo, del papa de mis hijos', dijo.
Gette reconoció que sí hizo préstamos a la Universidad durante el tiempo en que estuvo al frente de la rectoría, pero que 'nunca se le pasó por la cabeza apoderarse de esos dineros'. 'Yo pedí préstamos, claro que lo hice. Si yo necesitaba dinero prestado, yo solicitaba por carta y firmaba pagaré correspondiente y me descontaba como debía. Entonces cómo me voy a querer apoderar de una cosa, siendo que yo nunca manejé dinero, nunca tuve acceso, porque ahí había departamentos que eran responsables de cada cosa', sostuvo.
La exrectora enumeró todos los 'logros' alcanzados por el alma mater durante su administración.
'Hice muchísimos programas más, muchísimos obras y construcciones, hicimos una sede en Miami que ninguna universidad en Colombia había logrado eso, hicimos un equipo de fútbol, que tampoco lo tenía ninguna universidad en Colombia'.
Gette, quien actualmente se encuentra privada de la libertad en la cárcel El Buen Pastor, en cumplimiento a la condena por apropiarse de un millón de dólares de la universidad, dijo también que cuando Ramsés Vargas apareció en el centro educativo 'empezaron a aparecer denuncias en su contra'. 'Yo empecé a tener problemas porque me empezaron a señalar injustamente unos paramilitares que me empezaron a denunciar de cosas que yo no quise pagar, porque no quise dejarme extorsionar, entonces es allí cuando apareció Ramsés Vargas y empezaron a aparecer un montón de denuncias en mi contra y cuando vi que yo tenía problemas judiciales quise clausurar mi deuda'.
La diligencia judicial fue aplazada y los alegatos por parte de la defensa de Silvia Gette quedó programada para el 5 de agosto.
