Miembros de la Unidad de Infancia y Adolescencia de la Policía Metropolitana de Barranquilla amonestaron en la mañana de ayer en el parqueadero del aeropuerto Ernesto Cortissoz a una pareja que dejó en la parte trasera de un taxi a una menor de un año de nacida, mientras iban a buscar a la zona de arribos nacionales a un familiar que venía de viaje.
Fuentes del aeropuerto informaron que 'se activaron los protocolos de seguridad requeridos', cuando la vigilancia de la terminal detectó a la 'menor de 1 año de edad, quien se encontraba en uno de los parqueaderos dentro de un automóvil con sus ventanas cerradas, sin ninguna supervisión de un adulto'.
'Una vez el caso fue conocido, el personal de vigilancia y seguridad del Aeropuerto aplicaron los protocolos de este caso, asistiendo a la menor y llevándola a la unidad de Sanidad. En el aeropuerto, la seguridad es una prioridad. De allí que se apliquen estándares de análisis de riesgos y la implementación de medidas de control en cada uno de nuestros espacios, que fue lo procedido en este caso', resaltó la terminal aérea.
Por otro lado, la Policía comunicó que los padres de la niña habían contratado el taxi para trasladarse hasta el aeropuerto y se bajaron del vehículo en distinto momento para verificar la llegada del viajero. Mientras que el taxista manifestó que se bajó del vehículo y no se percató de que en la parte trasera estaba la niña dormida. Cuando la pequeña despertó y no vio a nadie dentro del carro entró en llanto. De esa manera fue que personal de seguridad del Cortissoz se alertó y se sacó a la niña del carro.
El ICBF, a través de un comunicado, calificó el caso como una aparente negligencia.
Indicó además que se 'abrió un Proceso Administrativo de Restablecimiento de Derechos en favor de la menor de edad e impuso una amonestación a los padres, que consiste en la asistencia obligatoria a un curso pedagógico de buenas prácticas de crianza y la firma de un acta de compromiso'.