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En medio de una gran muchedumbre se llevó a cabo este jueves el sepelio del acordeonero Cartagenero, Álvaro Vega, asesinado de varias puñaladas el pasado fin de semana en Iquitos, Perú, al parecer a manos de su compañera sentimental. 

Los restos del músico fueron velados en cámara ardiente durante la noche del pasado miércoles y la madrugada de ayer, en la plaza principal del barrio La María, en Cartagena.

Desde allí el cuerpo del músico salió en medio de una caravana hasta llegar, la tarde de ayer, al cementerio Jardines de Cartagena, donde se realizó el sepelio. 

El cuerpo de Vega partió el pasado lunes desde 'El Templo del Vallenato'(discoteca donde laboraba y donde fue asesinado) ubicado en Iquitos hacia el aeropuerto internacional Francisco Secada Vignetta. 

Desde esa ciudad peruana, sus restos subieron a un vuelo que tenía como destino Bogotá y de partió hasta Cartagena, donde arribó la noche del pasado miércoles. 

El músico fue apuñalado en varias oportunidades, pero la mortal fue la que le propinaron en el pecho. La herida tenía 22 centímetros de profundidad y el cuchillo medía 30 centímetros. Las miradas están sobre Nelly Acosta Egusquiza, de 40 años, pareja del músico.

Álvaro Vega era hijo de Lucho Vega, hermano mayor del acordeonero Manuel Vega, perteneciente a una dinastía de músicos en Cartagena.